La líder de las Damas de Blanco, Berta Soler, volvió a negarse a pagar las multas impuestas en 2022 por el gobierno cubano por motivos políticos.
Soler explicó que este jueves por la tarde se presentó en su domicilio una funcionaria del municipio Habana del Este para negociar el pago de las sanciones económicas impuestas durante el pasado año.
"Mi respuesta fue, que no voy a pagar ninguna multa por razones políticas impuesta y ordenada por la Seguridad del Estado", escribió la opositora en su cuenta de Facebook.
La defensora de los derechos de los presos políticos de Cuba compartió una foto del requerimiento de pago hecho por la funcionaria cubana, donde se especifica que hasta la fecha tenía 21 multas pendientes, aunque no se especificó cuál es el monto de la deuda.
Un reporte de junio del pasado año contabilizaba un total de 16 multas sin pagar, de las cuales 13 fueron impuestas en 2022, el resto en años precedentes.
Como no había efectuado el pago de las sanciones, la Seguridad del Estado amenazó a Soler con llevarla a la cárcel, de acuerdo con una publicación hecha por ella misma en internet.
Es habitual el acoso selectivo de los órganos represores cubanos contra las Damas de Blanco, que cada domingo intentan protestar de manera pacífica en contra del gobierno comunista y asistir a celebraciones religiosas.
Las activistas de esa organización de la sociedad civil independiente sufren detenciones en la vía pública, despliegue de brigadas de respuesta rápida, actos de repudio, amenazas y otras acciones de represión, que son denunciadas constantemente en redes sociales y otras plataformas.
El primer domingo del año, la policía detuvo a Berta Soler al salir de la sede de las Damas de Blanco, en Lawton, cuando pretendía dirigirse ala catedral de La Habana y participar en una misa.
"Fui interceptada por un operativo combinando el DSE y PNR, impidiendo que continuara para mi destino", denunció la cubana en su perfil de Facebook.
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