El padre de Léster Domínguez, el adolescente que machetearon en Holguín para robarle un teléfono, pide ayuda humanitaria para seguir luchando por la recuperación de la salud de su hijo.
“Me veo en la obligación de pedir una ayuda humanitaria, porque esto es de nunca acabar”, apuntó este lunes en Facebook Dennis Domínguez, en su habitual parte del proceso de recuperación de Léster, en el cual ya llevan cuatro meses de lucha incansable.
Domínguez apuntó en su red social que su hijo sigue sin fiebre y que los médicos le dijeron que le iban dar el alta, aunque la escara que padece por estar encamado aún sigue sin sanar.
“Léster lleva cuatro meses con la escara, que fue la que provocó la neumonía, al tener una bacteria en ella, y con esta, es la tercera neumonía que le combaten, y ellos mismo dicen que lo recursos están limitados, me voy para la casa, donde voy a resolver”, comentó en su publicación.
También apuntó que como su niño quedó parapléjico lo tiene que virar porque él no puede, y a la vez criticó que no le dicen nada sobre la escara y la traqueotomía ni le dan turno para ver su evolución.
Dijo, además, que él lleva cuatro meses sin trabajar y que en este tiempo lo han apoyado con medicamentos, aspiradora, silla de ruedas, vitaminas, alimentos, aunque ha tenido que comprar “por fuera” pañales desechables a 1,700 pesos, toallitas húmedas a 700 el paquete, una caja de pollo a 9,000 pesos y aceite a 700 CUP.
“Me veo en la obligación de pedir una ayuda humanitaria, porque esto es de nunca acabar”, reiteró Domínguez, quien lleva cuatro meses en una batalla campal por la vida de su hijo.
Este fin de semana, además, denunció las malas condiciones del centro asistencial donde ha estado en los últimos 10 días su hijo para recibir un tratamiento contra la neumonía.
"Hemos tenido que bajar de un quinto piso, para buscar agua potable", escribió en Facebook Dennis Domínguez.
Asimismo, describió el déficit de sábanas y medicamentos, algo recurrente en este momento en todo el país, en medio de una crisis generalizada, que afecta a miles de cubanos.
En esta última semana, Domínguez igualmente había denunciado que en ese hospital ni había agua potable, sábanas ni medicinas y debieron buscar pañales desechables para evitar que se manchara la ropa de cama.
"Este ingreso se pudo a haber evitado", dijo el padre, quien responsabilizó a la subdirectora del hospital por no actuar en tiempo y dejar el tratamiento adecuado para último momento.
Sobre la investigación para juzgar al atacante de Léster Domínguez se sabe poco, la familia informó en su momento que el sospechoso fue detenido y que un primo, que pudo estar relacionado con el ataque armado, se suicidó.
La familia espera que se haga justicia y pronto el adolescente pueda recuperarse y volver a su vida normal.
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