Julio César Correa Hernández, abuelo de un adolescente cubano de 16 años que en días recientes se suicidó mientras cumplía el Servicio Militar Activo (SMA), envió un sentido mensaje a su nieto donde afirma que nunca dejará de pensar en él.
"Hoy se cumplen tres meses de tu partida, mi niño, siempre estarás en mi corazón, cada recuerdo tuyo vivirá por siempre en quienes te conocieron, nunca dejaré de pensar en ti, algún día nos volveremos a ver", escribió en una publicación de Facebook dedicada al menor, Maikol Arcia Hernández, a quien el abuelo llama "mi angelito".
El pasado 26 de mayo, Arcia Hernández, natural de Güines, Mayabeque, se quitó la vida en la Unidad 6244, perteneciente al municipio San José de las Lajas.
Su abuelo explicó que su nieto padecía de trastornos mentales que no habían sido valorados por las autoridades médicas militares.
"Hace tres meses me comentó que se iba a quitar la vida de un tiro. Hablé profundamente con él. Al tercer día le hago saber al capitán Yordany está preocupación mía como padre de familia, el cual me manifestó que eso eran malcriadeces", denunció el día de la muerte.
Acorde a su relato, le pidió al mencionado oficial que no le entregaran armas a su nieto "para evitar males mayores", pero el capitán hizo caso omiso de su petición y lo puso hacer posta en un sitio donde se guardaban armamentos y municiones.
También denunció que al niño lo reclutaron a pesar de haber sufrido una fractura de mandíbula hace dos años.
Correa Hernández comentó al respecto que el joven se fracturó la mandíbula en tres partes, como consecuencia de un batazo que recibió con un bate de aluminio, lo que obligó a que le implantaran “una lámina de metal con puntos de alambre”, que no se podía retirar y era fija de por vida.
El abuelo ha pedido justicia, sin que sus reclamos sean escuchados.
Las muertes por suicidio en Cuba aumentaron en 2020, al producirse 81 hechos más que los registrados en 2019, con un amplio predominio de los casos del sexo masculino. Según datos del Anuario Estadístico de Salud de 2021, elaborado por el Ministerio de Salud Pública (MINSAP), ese año 1,548 cubanos se suicidaron, para una tasa bruta de 13,8 por 100 mil habitantes. En 2019 la cifra fue de 1,467.
"Cada vez más son los jóvenes que prefieren quitarse la vida antes de pasar por un Servicio que, más que militar, es una manera de adoctrinar a los jóvenes a defender los intereses de los comunistas y la dictadura", señaló una cubana al conocer la noticia de la muerte de otro adolescente, Ernesto Miranda (18 años), mientras cumplía el Servicio Militar en La Habana.
El joven, residente en el municipio Cerro, pasaba el Servicio en la Unidad del Regimiento de Artillería, en La Lisa. "Me ha llegado con gran tristeza (...) la noticia de que este niño perdió la vida en la UM 1900 de La Lisa la semana pasada (...) Es demasiado ver tanta juventud perder la vida en esa institución que ya se puede acusar de criminal", reveló Félix Alfredo González en el grupo de Facebook "No más muertes en el Servicio Militar".
A mediados de octubre de 2022, un joven recluta cubano se suicidó mientras cumplía el SMA en el Campamento El Cacahual, en Sancti Spíritus.
Fuentes allegadas al caso confirmaron a CiberCuba que Alexei Oyarzábal, un muchacho espirituano de solo 16 años, se había disparado con un fusil AK y había sido trasladado al Hospital “Camilo Cienfuegos”, donde se presentaron las autoridades, entre ellas la delegada del Ministerio del Interior en la provincia y personal de las Fuerzas Armadas.
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