La Coorporación CIMEX del régimen cubano promociona la marca de café Cubita, en medio de la escasez de ese producto en la isla.
"¡Buenos días a todos nuestros seguidores! Que la aroma y el sabor del Café Cubita haga de sus mañanas una experiencia única", publicó en Facebook junto a una taza humeante de esta entrañable bebida para los cubanos la Sucursal CIMEX de Pinar del Río.
Sin embargo, los cubanos raramente pueden acceder al café, a pesar de que forma parte de su tradición y de que otrora fue uno de sus cultivos privilegiados.
Actualmente el régimen importa café de baja calidad y lo raciona para la población, que no puede garantizar el consumo diario de una taza.
En cambio, el café que se produce en Cuba (paquete de 1 kg “genuino de montaña”), alcanza unos precios que equivalen al doble y hasta el triple del salario mínimo de los trabajadores cubanos.
La carencia de café ha afectado a los a lo largo y ancho del país y siempre es un tema que genera polémica e inconformidades. En Holguín, por ejemplo, la población no ha recibido café desde junio.
A pesar de que el Ministerio de Comercio Interior entregó la cuota de mayo correspondiente a la libreta de abastecimiento, las torrefactoras de esa provincia no han producido café molido durante cuatro meses debido a las limitaciones en la importación de granos, según informó el periódico oficialista Ahora.
Igualmente en Sancti Spíritus no se ha distribuido café desde mayo, y las autoridades locales no pueden determinar cuándo se reanudará la producción de este producto, explicó el diario local Escambray.
Tribuna de La Habana, por su parte, la ausencia de café normado se extiende por más de tres meses.
Los cubanos aseguran que cada día es más difícil tomar una taza de café por las mañanas.
El régimen continúa priorizando el turismo, y la víspera trascendió que solo en julio Cuba importó de EE.UU. $2,342,281.00 dólares en café.
La isla ha ido perdiendo sus principales industrias, café y azúcar, por las ineficaces políticas del régimen.
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