Un hombre de 65 años fue detenido en Miami por administrar un centro de vida asistida sin las autorizaciones correspondientes.
Otto Egea alquilaba su vivienda a más de 30 personas con distintos grados de discapacidad mental y física. Ahora enfrenta acusaciones por operar ilegalmente esta instalación que no cumplía con los requisitos que exigen las autoridades.
La policía de Miami-Dade llevó a cabo la detención de Egea tras investigar varias denuncias. Realizaron un registro en la propiedad, ubicada en la intersección de la calle 207 y la avenida 122 del suroeste.
Aparentemente era una simple vivienda familiar, pero la residencia ocultaba una situación alarmante.
Ángel Rodríguez, representante de la policía de Miami-Dade, reveló que los residentes en la casa tenían distintas edades y diversos padecimientos médicos y psicológicos. Entre ellos hay personas de la tercera edad.
"Había medicamentos que no estaban asegurados, que cualquiera de los pacientes podían tener acceso e incluso, podían administrarse la dosis incorrecta", comentó Rodríguez.
Todos los inquilinos fueron evacuados para recibir las evaluaciones médicas y psicológicas necesarias. Algunos podrán permanecer provisionalmente mientras buscan un nuevo hogar.
El centro presentaba condiciones preocupantes, como el acceso descontrolado a medicamentos, lo que significaba un peligro para los residentes.
Una inquilina y voluntaria en el lugar, Kimberly Baker, defendió el estado de la casa. La mujer asegura que hay en la vivienda un ambiente de colaboración y bienestar.
Otto Egea tiene antecedentes penales. Fue condenado por el FBI en 2015 por fraude. Se presentó este jueves ante el tribunal y se le impuso una fianza de 5,000 dólares.
Este caso destaca la importancia de la supervisión y el cumplimiento legal en los centros de atención residencial. Además resalta los derechos y la seguridad de la población vulnerable en Miami. La investigación policial continúa abierta.
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