Dos de los médicos cubanos sentenciados en Bayamo, provincia de Granma, por supuesta negligencia médica tras la muerte de un paciente en una operación para la que no había recursos en el hospital, han reclamado justicia ante un hecho que ha conmovido a la comunidad médica y a la sociedad cubana en general.
La doctora Yoandra Quesada Labrada, sentenciada a 1 año y 6 meses de prisión domiciliaria, utilizó la plataforma digital Facebook para recordar que “¡no somos asesinos!” y exigir una “revisión exhaustiva del caso por un personal competente, ¡no a la injusticia!”.
Otro de los condenados fue el doctor Rafael José Sánchez Vásquez, especialista de segundo grado en cirugía general y profesor asistente en el Hospital Carlos Manuel de Céspedes, de Bayamo, el lugar donde ocurrieron todos estos lamentables hechos.
En Facebook, el doctor, sentenciado a dos años de prisión domiciliaria, dijo al conocer su fallo que “desgraciadamente no hay justicia ni justeza”.
El galeno también recurrió a la plataforma Youtube para hacer su versión del juicio vivido a finales de noviembre en esa ciudad del oriente cubano.
Tras rememorar algunos pormenores del evento, el doctor Sánchez Vázquez se refirió a las condiciones específicas en que llegó el paciente a la instalación hospitalaria y a su desarrollo hasta el fallecimiento del mismo, incluso mencionando nombres de colegas que lo acompañaron en el trabajo con el joven fallecido.
Sobre el juicio dijo que quedó allí demostrado que “ha sido un teatro y una escenificación”, en el que se tomó en cuenta “lo que dijo la fiscalía y la comisión de expertos de Manzanillo”, sin importar las pruebas aportadas por los abogados defensores.
“Mi abogada en sus conclusiones lo dijo porque después de todo lo que pasó en el juicio viene la fiscal y mantiene sus peticiones… Ella dijo: la ley no le prohíbe a la fiscalía después de escuchar la vista oral, modificar sus conclusiones preliminares”.
“Si a pesar de todo lo que se dijo aquí, la fiscalía ha mantenido su posición a ultranza, pues no hubiéramos hecho el juicio”, aportó el hombre.
Además de la doctora Quesada Labrada y el doctor Sánchez Vázquez, también fue condenado a dos años de prisión domiciliaria el doctor Henrry Rosales Pompa Rafael y el cirujano Ristian Solano a tres años bajo el mismo régimen.
De igual manera, la radióloga involucrada en el caso (Elizabeth Silvera) fue absuelta, pero su sobrino William Pérez Ramírez fue condenado a un año de prisión domiciliaria.
Tras darse a conocer estas sentencias, el médico cubano Alexander Jesús Figueredo Izaguirre envió un mensaje a sus colegas en la Isla.
"Si quieren más pruebas de que están sirviendo de cómplices a una dictadura, trabajando por un miserable salario y corriendo el riesgo de ir a una prisión, pues aquí las tienen", dijo en su muro de Facebook.
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