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El Proyecto Social Comunitario “Luz de Vida” enfrentó una amarga experiencia el pasado lunes en el municipio Plaza, La Habana, al reportarse el robo de parte de una caldosa destinada a personas vulnerables.
Eusebio Díaz, integrante del proyecto, informó en el grupo de Facebook “Proyecto Social Comunitario ‘Luz de Vida’” que el evento tuvo lugar en el restaurante La Pelota, conocido por su ubicación céntrica en la ciudad.
Subrayó que la actividad estaba planificada para beneficiar inicialmente a 100 personas y contó con la colaboración de la delegada Niurka, del Consejo Colón Nuevo Vedado, quien gestionó la entrega de dulces para complementar la jornada.
Desde el inicio, el ambiente estuvo lleno de solidaridad, con personas sorprendidas y agradecidas al conocer que la comida era completamente gratuita.
“Todo marchaba de maravilla, las personas repetían porque les encantaba, y quienes tienen una actitud deambulante estaban felices, contentos y agradecidos”, relató Díaz.
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Sin embargo, la jornada tomó un giro inesperado cuando, al regresar a la cocina, los organizadores descubrieron que una parte de la caldosa había sido sustraída por desconocidos.
Esta pérdida significó que al menos 40 personas se quedaron sin recibir su porción de comida: “Sufrimos una gran desilusión. Es un acto repudiable y no tiene excusa”, expresó Díaz, visiblemente afectado por el hecho.
El proyecto lamentó profundamente la situación y ofreció disculpas a las personas que no pudieron ser atendidas y anunciaron que no volverán a realizar actividades en ese lugar debido a lo sucedido.
A pesar del incidente, la iniciativa mantiene su compromiso con la comunidad y reafirma su misión de ayudar a quienes más lo necesitan, confiando en el apoyo y la solidaridad de los ciudadanos.
Por estos días, activistas de varias provincias han desarrollado iniciativas solidarias en beneficio de las personas que, abandonadas por el régimen, padecen hambre y escasez.
Un grupo de voluntarios en Cárdenas repartió comida y postres donados por vecinos y negocios locales, destacando la solidaridad comunitaria y el trabajo colectivo durante una Navidad marcada por la crisis económica.
En Santiago de Cuba, la Misión San Pedro, ubicada en el Reparto Flores, ofreció un almuerzo solidario el sábado último a 200 personas, incluyendo a quienes no pudieron asistir por su estado de salud.
En esa misma provincia, un grupo de activistas y voluntarios, liderados por el escritor Yasser Sosa Tamayo y el pastor Darlon Bermúdez, logró llevar un rayo de esperanza a 150 personas necesitadas en Santiago de Cuba.
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