El régimen cubano intensificó su ofensiva verbal y diplomática contra el Encargado de Negocios de Estados Unidos en La Habana, Mike Hammer, acusándolo de mentir, promover la desestabilización interna y violar la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas.
A través de la funcionaria del ministerio de Relaciones Exteriores (MINREX), Johana Tablada de la Torre, se lanzó una advertencia directa: “nadie debe confundir la paciencia que ha tenido Cuba frente a este tipo de actos, con debilidad”.
Estas declaraciones fueron incluidas en un video promocional publicado por el medio oficialista Prensa Latina, pero resultaron eliminadas de la versión final. El corte de esa parte del material sugiere que el contenido excedía el tono diplomático habitual y podía inducir a malentendidos o escalar el conflicto bilateral.
En el fragmento eliminado, Tablada calificó las acciones de Hammer como “injerencia abierta”, lo acusó de reunirse con personas “a las que Estados Unidos les ha dado dólares para atentar contra el orden constitucional” y afirmó que la labor de la embajada estadounidense es la de “verdugo”.
La subdirectora general de la Dirección General de Estados Unidos del MINREX también declaró que “el gobierno de Cuba tiene regulaciones” sobre con quiénes puede reunirse un diplomático extranjero, y reafirmó que en lo que no cederán “ni un ápice es con la revolución, el socialismo y nuestra soberanía”.
Las declaraciones fueron acompañadas por una narrativa que vincula la presencia y declaraciones del diplomático con una supuesta campaña estadounidense para presentar a Cuba como una amenaza a los intereses nacionales de EE.UU.
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Estas palabras se suman a una retórica que ha ido subiendo de tono en las últimas semanas, en respuesta al trabajo de "diplomacia abierta" de Hammer, quien ha sostenido encuentros con activistas, opositores y miembros de la sociedad civil independiente en Cuba.
Tablada de la Torre acusó al diplomático de actuar con una “agenda de agresión e injerencia” y lo responsabilizó por acciones que, según el régimen, son contrarias al orden constitucional cubano. La funcionaria argumentó que el diplomático no puede “reunirse con quien quiera” y debe ajustarse a las “regulaciones” que rigen su actividad en la isla.
En un video reciente, la diplomática también aseguró que Hammer ha mentido “conscientemente” sobre la situación del país y que sus declaraciones en Miami —donde afirmó que “la revolución ha fracasado” y que los cubanos responsabilizan al régimen de la crisis— forman parte de una estrategia de desestabilización.
El Departamento de Estado de EE.UU. ha defendido al diplomático, asegurando que su labor es legítima y se enmarca en el derecho internacional. “Apoyar al pueblo cubano no es un crimen”, expresó una portavoz oficial. Washington ha reiterado su compromiso con los derechos humanos y con la sociedad civil cubana.
La escalada de tensiones entre el régimen cubano y el diplomático estadounidense
Desde su llegada a La Habana en noviembre de 2024, Hammer ha desplegado una agenda activa de encuentros con opositores, activistas, emprendedores y ciudadanos comunes.
Estas acciones han generado una creciente preocupación en el régimen cubano, que ha intensificado sus ataques mediáticos y diplomáticos contra el diplomático estadounidense.
El 30 de mayo de 2025, el MINREX convocó a Hammer para entregarle una Nota Verbal de protesta, acusándolo de incitar a ciudadanos cubanos a cometer delitos graves y actuar contra el orden constitucional.
La reunión estuvo encabezada por Alejandro García del Toro, Director de Temas Bilaterales del MINREX, quien expresó el rechazo firme del régimen cubano al comportamiento del diplomático estadounidense, calificándolo de irrespetuoso e injerencista.
Las autoridades cubanas también criticaron lo que calificaron como una "manipulación pública e insultante" de la figura de José Martí por parte de Hammer, tras su visita a la tumba del Héroe Nacional en Santiago de Cuba. A juicio del MINREX, sus declaraciones sobre Martí revelan un desconocimiento profundo del legado independentista y antimperialista del prócer cubano.
En respuesta a las acusaciones del régimen cubano, el Departamento de Estado de Estados Unidos defendió a Hammer, afirmando que su labor en Cuba busca apoyar al pueblo cubano y promover los derechos humanos. Funcionarios estadounidenses reiteraron su compromiso con una política exterior que responsabilice al régimen cubano por su influencia negativa en la región.
El régimen cubano ha intensificado sus ataques mediáticos contra Hammer, reflejando una creciente preocupación por la estrategia de diplomacia directa y abierta que ha desplegado el funcionario norteamericano desde su llegada a la isla.
A pesar de las críticas y acusaciones, Hammer ha continuado con su agenda en la isla, reiterando su interés en escuchar directamente al pueblo cubano y fortalecer los lazos entre ambos países desde la base.
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