Padura: “No quiero hablar de política porque los periodistas pueden dar una proyección mayor de lo que comento”

El escritor cubano vivo de mayor proyección internacional: Leonardo Padura, ha sido entrevistado por RT en español. En esta charla, que ronda los 28 minutos, Padura ofrece su punto de vista sobre algunos aspectos relativos a su literatura, pero principalmente habla sobre su relación con los periodistas en lo que concierne a la difusión de sus libros y a sus opiniones políticas. También hace una valoración de la realidad actual y del futuro de Cuba.

Padura opina que el nivel del periodismo ha bajado considerablemente, y que eso lo lleva a ser más cauto a la hora de enfrentarse a ese apartado en el recorrido público que sigue siempre a toda publicación de un libro suyo.

Aunque entiende que la promoción es una parte importante de la literatura, asegura que le molesta que le pregunten constantemente sobre la política cubana, sobre el futuro de Cuba o que haga valoraciones sobre temas como la visita de Obama o la muerte de Fidel Castro.

Y añade:

“No quiero hablar de política porque los periodistas pueden dar una proyección mayor de lo que comento”.

Al mismo tiempo, en lo relativo a sus libros, asegura:

“No soy un escritor con una imaginación especial, soy un observador de la realidad”.

Teniendo en cuenta que Leonardo Padura es un escritor que se inspira para escribir sus novelas ―tal como él mismo explica― en la “observación de la realidad” que lo rodea, no se entiende, por otra parte, que le moleste que le pregunten su opinión sobre asuntos de los que su propia literatura es reflejo: la realidad cubana.

Miedo, siempre de fondo se intuye el miedo a la libertad de expresión y a sus consecuencias. La contradicción de base queda manifiesta: escribe sobre Cuba, sobre la realidad cubana, pero al mismo tiempo no le gusta que le pregunten sobre la realidad actual o el futuro de la Isla.

Es evidente que nadie tiene una bola de cristal para saber el futuro de Cuba, pero ser un observador agudo de la realidad cubana no convierte en descabellado el hecho de que no uno, sino muchos periodistas, le pregunten al escritor Leonardo Padura sobre el tema.

Sin embargo, aquí funciona el comedimiento, rayano en la autocensura, como mecanismo de autodefensa y protección.

Seguramente Padura tiene talento para explorar los caminos de la Ciencia Ficción, tal vez de ese modo consiga quitarse de encima el lastre cubano y las preguntas derivadas de su oficio.