Pese a que está cerca de cumplirse ya el segundo aniversario del deshielo de las relaciones diplomáticas entre Cuba y EE.UU, las empresas norteamericanas se enfrentan aún hoy a obstáculos para su establecimiento en la Mayor de las Antillas.
En el marco de la celebración de la Feria Internacional de La Habana, 25 empresarios norteamericanos se reunieron en el ex club de empresarios estadounidenses en La Habana Vieja para valorar cómo marcha el establecimiento de empresas norteamericanas en la Isla.
Los empresarios coincidieron en señalar que las trabas burocráticas del gobierno cubano así como la vigencia del embargo y el sistema económico socialista del país les obligan a contemplar como un proceso a largo plazo la entrada total en el mercado del país.
Pese a estas trabas, y aunque aún queda mucho por hacer, lo cierto es que se han producido recientemente hechos históricos que favorecerán las relaciones comerciales entre ambos países.
En este sentido, el 26 de diciembre, EE.UU se abstuvo por primera vez en la Historia a la petición por parte de la Asamblea de la ONU de retirar el embargo a Cuba. Este hecho significa que la finalización del embargo quedaría ya en manos del Congreso después de que el poder ejecutivo cuestionase de esta manera su eficacia.
También en este tiempo de relajación de las relaciones entre ambos países se han producido hechos que hubieran sido impensables hace algunos años como son el establecimiento de cruceros, vuelos comerciales e incluso un hotel estadounidense en la Isla.
Por su parte, el vicepresidente de la Cámara de Comercio de los Estados Unidos, declaró durante la reunión que, pese a que se han logrado avances sectores comola aviación civil y las telecomunicaciones aún queda mucho por avanzar áreas como infraestructuras, energía y salud.
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