En virtud de la llamada "ley Magnitsky", el gobierno de Obama ha sancionado a cinco ciudadanos rusos, entre ellos un estrecho colaborador de Putin, Aleksander I. Bastrykin, titular del Comité de Investigaciones de Rusia. Además han sido sancionados dos ex espías rusos y dos ex funcionarios.
La ley Magnitsky permite sancionar las violaciones de derechos humanos cometidas por ciudadanos rusos. La ley contempla sanciones que incluyen la prohibición de visados para viajar a Estados Unidos y el bloqueo de los activos que puedan tener bajo jurisdicción estadounidense.
Estas nuevas sanciones llegan después de que Barack Obama decretara el 29 de diciembre sanciones contra Rusia, país al que responsabiliza de la injerencia en las elecciones presidenciales del pasado 8 de noviembre a través de la filtración de correos de Hillary Clinton.
En esa ocasión, Estados Unidos ordenó las sanciones contra organismos de espionaje, individuos y empresas de seguridad informática rusos. Además se decretó la expulsión de 35 diplomáticos de ese país.
Rusia, por su parte, ha negado en diversas ocasiones su implicación en la filtración de correos, una opinión con la que se muestran de acuerdo también Donald Trump y WikiLeaks, el portal que publicó los correos.
Por el momento, Putin no ha respondido a las sanciones esperando que la llegada al poder de Donald Trump suponga un giro a las relaciones diplomáticas entre Estados Unidos y Rusia.
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