Los fuertes vientos, las altas temperaturas y la intensa sequía que vive el país han sido los aliados para propagar los grandes incendios forestales que vive el país.
En estos momentos son ya más 519.000 las hectáreas quemadas mientras que 118 focos continúan activos.
Todavía no hay confirmación oficial de las causas del incendio aunque la presidenta del país, Michelle Bachelet,insinuó que pudieran ser intencionados.
Por el momento han sido detenidas ya 43 personas por esta causa. Ayer la presidenta señaló “Si ha habido intencionalidad, y estamos seguros de que sí ha habido intencionalidad en algunos focos, vamos a seguir las responsabilidades hasta el final.
La crítica situación del país se evidencia en las cifras de la Oficina Nacional de Emergencia que señaló existen 2.025 personas en albergues, 3.270 damnificados, 1.089 viviendas destruidas y 11 fallecidos, una situación que ha obligado al gobierno chileno a recurrir a la ayuda internacional.
En este momento trabajan en el país casi 10.000 brigadistas, entre los que colaboran fuerzas de Argentina, España, Francia, Portugal y México, Colombia y Perú.
Además, el gobierno ruso y el gobierno estadounidense han enviado dos aeronaves especializadas en la extinción de incendios.
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