
Sucedió en una playa de la isla Hailing (Guangdong, China). Los testigos del hecho cuentan que un delfín se había quedado varado en la playa y mientras los bañistas observaban al animal y concluían si estaba vivo o muerto, apareció un hombre que cargó al delfín sobre sus hombros y se fue sin decir nada.
Caminó un tramo por la arena con el animal a cuestas hasta que llegó a su auto, lo colocó en el asiento trasero y se fue.
Uno de los testigos del hecho filmó al hombre y subió el vídeo a YouTube, donde en pocos días se ha viralizado. La actitud del sujeto ha generado críticas e indignación entre la sociedad china.
La Policía ha abierto una investigación para identificar y localizar al hombre, que podría enfrentar cargos criminales si lo encuentran.
Un oficial encargado del caso ha explicado que “los delfines son animales protegidos en China. No importa si estaba vivo o muerto. Estuvo mal llevárselo. Debió llamar a las autoridades”.
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