Aaron Schlossberg, el abogado racista que amenazó a los empleados de un restaurante por hablar en español, volvió a ser protagonista en plena calle de Manhatann cuando se encontró a un reportero de NBC News.
El periodista le preguntó al letrado, que se encontraba cerca de su vivienda, si tenía intención de pedir disculpas a las personas que menospreció. La respuesta fue el silencio.
Schlossberg, que iba ataviado con gafas de sol y gorro, trataba de coger un taxi. Sin embargo cuando vio que no era posible, optó por salir corriendo mientras miraba hacia atrás para percatarse de que nadie le seguía.
Sus más recientes insultos racistas le llevaron a perder su trabajo y en las últimas horas los usuarios revelaron nuevos vídeos en las redes sociales que evidencian sus comportamientos racistas en público.
El ataque hacia integrantes de la comunidad hispana en Estados Unidos también ha desencadenado en una petición formal para inhabilitarle.
Este hombre, que dijo sentirse muy ofendido porque los inmigrantes no respetaban el idioma de su país, tenía una oficina de abogados especializada en derecho comercial y algunos de sus clientes son hispanos. De hecho en su página web avisaba que hablaba español fluido.
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