Tal como estaba previsto, en la mañana de este viernes 13 de julio fue inflado en las inmediaciones del Parlamento Británico un globo que representa a Donald Trump, caracterizado en este caso como un bebé malhumorado en pañales. El singular hinchable es de color naranja, mide seis metros y tiene un teléfono móvil en una de sus manos.
Un ciudadano británico entrevistado en este reportaje considera que la idea es "realmente brillante", máxima expresión del singular humor inglés y, según afirma, "representa la forma en que manejamos las cosas que no nos gustan".
Y añade: "Los valores británicos son acerca de la decencia y Trump simplemente no es un hombre decente. Él no es un líder decente y es bueno hacérselo saber".
En otra avenida cercana, donde se encuentra la sede del Gobierno y varios ministerios, se paseó hoy también un robot de la popular serie británica de ciencia ficción Doctor Who, que posó con su "pelo rubio", para delicia de los turistas.
Por su parte, el alcalde de Londres -el laborista Sadiq Khan- ha defendido su decisión de autorizar el vuelo del "bebé Trump", que ha sido criticado por los conservadores, y afirmó que no es su papel "ejercer de censor" o determinar si una protesta es "de buen o mal gusto".
El itinerario de Trump durante su visita a Londres ha sido cuidadosamente diseñado para evitar las protestas y que no vea el globo hinchable en las inmediaciones de la sede del Parlamento.
La reina Isabel de Inglaterra recibió al presidente estadounidense y a la primera dama Melania Trump este viernes, en el Castillo de Windsor, algo que ha generado críticas hacia la monarca.
A ello se suma que la controvertida visita del presidente norteamericano ha subido de tono en las últimas horas, tras generar fuerte malestar entre los políticos británicos por unas declaraciones de Trump al diario The Sun, en las que aseguró que el plan de Theresa May sobre el brexit podía perjudicar el acuerdo comercial entre Estados Unidos y Gran Bretaña.
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