Donald Trump y Jair Bolsonaro protagonizaron un momento de los más futbolero durante la reunión que mantuvieron en la Casa Blanca, donde intercambiaron camisetas de las selecciones de Estados Unidos y Brasil.
El dirigente estadounidense entregó una camiseta que llevaba el nombre de su homólogo brasileño y con el número 19, en alusión al año en que se celebra este encuentro. El mandatario latinoamericano, por su parte, devolvió el obsequio y regaló otra elástica personalizada y con un dorsal mítico: el 10, repleto de historia en el fútbol brasileño, ya que fue el que llevó Pelé, algo a lo que hizo referencia Bolsonaro.
"Yo soy un poco más joven, pero todavía me acuerdo de Pelé", aseguró.
"Aprovecho la oportunidad de hacerle entrega de este regalo. Una camiseta que simboliza al ídolo y mejor jugador de todos los tiempos, Edson Arantes do Nascimento, y que nos dio muchas alegrías en el fútbol. Es un placer entregarte aquí esta camiseta con tu nombre detrás", añadió.
Trump y Bolsonaro abordaron relaciones entre ambos países, así como la crisis que sufre Venezuela. En una rueda de prensa conjunta, el presidente de Estados Unidos sostuvo que podría designar a Brasil como un aliado no OTAN. "Vamos a analizar esto muy seriamente en términos de, ya sea la OTAN o algo que tenga que ver con la alianza", dijo.
Convertir a Brasil en un "gran aliado no perteneciente a la OTAN" implica una mejora de estatus que le otorga a un país acceso preferencial a la compra de equipos y tecnología militar de Estados Unidos.
El dirigente brasileño dijo que "Brasil y Estados Unidos están vinculados por las garantías de libertad, el respeto por la familia tradicional, el temor a Dios, nuestro creador, y por la oposición a la identidad de género, la corrección política y las noticias falsas".
Rechazo conjunto al socialismo
Ambos rechazaron repetidamente el socialismo y elogiaron los esfuerzos conjuntos para que Nicolás Maduro abandone el poder.
Bolsonaro no descartó apoyar una posible intervención de EEUU en Venezuela, con una respuesta ambigua sobre el tema en la conferencia de prensa posterior a su reunión con Trump, cuando una periodista le preguntó si permitiría que el territorio brasileño se usara para lanzar una intervención militar estadounidense, o si implicaría a personal de Brasil en esa operación.
"Hay algunos temas que, si hablas sobre ellos, ya no son estratégicos (...). Es una cuestión de estrategia, todo lo que discutamos aquí (en privado) lo cumpliremos, pero de algunas posibilidades no se habla en público", aseguró.
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