Vecinos residentes en diferentes zonas de Miami se quejan del creciente aumento en el robo de paquetes y correspondencia. El fenómeno se ha convertido en uno de los delitos más denunciados ante la policía local.
Aunque los ladrones intentan burlar las cámaras de video-vigilancia instaladas en el exterior de las viviendas, en la mayor parte de los casos el rostro de los ladrones queda registrado en imágenes.
Este reportaje de América Noticias cita el caso de un robo de un paquete de comida para perros en una vivienda ubicada en la calle Flagler y la 56 court.
Minutos después, a pocas cuadras de esa misma dirección, las cámaras captaron a una mujer que se robaba un paquete de otra vivienda.
También hay varios casos de robo de correspondencia, y las autoridades advierten que sacar una carta del buzón es un delito federal con graves consecuencias. De hecho, si la persona pone la mano dentro de un buzón, ya es un delito, incluso aunque no llegue a sustraer la carta.
Para evitar que les roben los paquetes, algunos vecinos del suroeste de Miami están tratando de permanecer en sus casas a la espera del camión de reparto.
Las autoridades locales califican esos episodios de robo como “crímenes de oportunidad”, y no el caso de una persona específica que se dedica a robar.
La funcionaria entrevistada en este reportaje indica que se trata de un amplio grupo de personas de cualquier edad que reaccionan ante una "oportunidad": ven algo, se bajan del auto, cogen el paquete y se van.
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