El Papa Francisco escribió una carta al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, donde le informa que las condiciones no están creadas para que el Vaticano intervenga como mediador, nuevamente, en la crisis política del país sudamericano.
Según Francisco esto se debe a que Maduro buscó el diálogo pero luego desatendió los compromisos.
En la carta de dos páginas y media redactada por el Sumo Pontífice el pasado 7 de febrero, como respuesta a la solicitud de mediación de Maduro enviada al Vaticano el 4 de febrero, se le recuerda al dirigente chavista que hubo repetidos intentos de buscar “una salida a la crisis venezolana”, pero todos fueron interrumpidos por la resistencia del régimen.
"Desafortunadamente, todos fueron interrumpidos porque lo que se había acordado en las reuniones no fue seguido por gestos concretos para implementar los acuerdos", declara.
Según el diario italiano Corriere Della Sera, en la carta el Papa se refirió a Maduro como “excelentísimo señor” y no utilizó -en ningún momento- la palabra “Presidente”.
El rol mediador de la Santa Sede en el conflicto político venezolano comenzó a finales del 2016. Desde aquel entonces, se pactó -a través del cardenal Parolin- una serie de condiciones que debían atenderse.
En la reciente misiva, el Papa realiza un recordatorio a aquellas “solicitudes” y puntualiza en "otras que se han agregado como resultado de la evolución de la situación". Además, alertó que es necesario "evitar cualquier forma de derramamiento de sangre".
"No se trata de un diálogo (...) sino de lo que ocurre cuando las diferentes partes en conflicto ponen el bien común por encima de cualquier otro interés y trabajan por la unidad y la paz", afirmó el representante del Vaticano.
Igualmente, Francisco deploró que los obispos venezolanos fracasaran en sus esfuerzos para ayudar a distender la crisis política y social en el país, donde buena parte de la población padece la escasez de alimentos y medicinas.
Desde el pasado 23 de enero, el clima político en Venezuela se ha agravado luego de la toma de posesión del titular de la Asamblea Nacional y líder de la oposición, Juan Guaidó, y la coexistencia de dos mandatarios.
Más de 40 países reconocen a Guaidó como el único representante legítimo de Venezuela porque consideran que las pasadas elecciones presidenciales de 2018 fueron manipuladas por el sucesor del fallecido Hugo Chávez.
Estados Unidos fue el primer país en reconocer a Guaidó como presidente interino de Venezuela y tomó medidas para congelar los activos del gobierno de Maduro, así como sanciones a la petrolera estatal venezolana PDVSA.
La crisis económica y política derivó en una crisis humanitaria, que es negada por Maduro, mientras Guaidó intenta que llegue la ayuda que necesitan los ciudadanos de Venezuela.
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