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Otra línea de cruceros de EE.UU, la Victory Cruise Lines, recibe permisos para viajar a Cuba

El CEO asegura que podría beneficiarse de los cambios anunciados por Trump la semana pasada.

Victory Cruise Lines © victorycruiselines.com
Victory Cruise Lines Foto © victorycruiselines.com

Este artículo es de hace 6 años

La compañía estadounidense de cruceros Victory Cruise Lines, una joven empresa naviera que cuenta con una sola embarcación, ha recibido los permisos requeridos para viajar a Cuba, informó el magazine especializado Caribbean News Digital.

Bruce Nierenberg, Presidente y CEO de Victory Cruise Lines, confirmó desde el pasado mes de mayo que su compañía había sido aprobada para operar cruceros de pequeño porte, de unos 250 pasajeros, para hacer un recorrido desde Miami hasta La Habana y de ahí circunnavegar la Isla.

Aunque los itinerarios aún no están programados, la línea quiere tener paradas nocturnas en al menos tres puertos, según Nierenberg. La nave anclaría en cotizados polos turísticos como María la Gorda, Cienfuegos, Trinidad, Santiago de Cuba y Matanzas.

"Siendo una compañía de barcos pequeños, estaremos buscando la mayoría de nuestros atracaderos en los puertos más pequeños y menos visitados, ya que podemos encajar en todos los puertos de Cuba que podrían hospedar un producto de crucero", dijo el directivo al medio de noticias Cruise Critic.

El CEO asegura que podría beneficiarse incluso de los cambios anunciados por Trump la semana pasada. Aunque el mandatario anunció que iba a reprimir los viajes independientes, la mayoría de las líneas de cruceros con rutas a Cuba podrán continuar viajando.

"Todos somos inclusivos, por lo que tenemos un control total sobre los viajes en tierra, su contenido, la forma en que se gestionan, la participación personal de nuestros líderes turísticos y todas las cuestiones relacionadas con la participación", dijo.

Para el empresario, el hecho de que las excursiones estén incluidas en el precio del viaje en cada puerto “asegurará que nuestros huéspedes puedan cumplir con los reglamentos estadounidenses".

Si bien la nueva política de Trump hacia busca cortar los negocios de EE.UU con el gobierno de Castro y sus militares, quienes controlan la economía nacional, la compañía informó que se encuentra trabajando con las autoridades cubanas para perfeccionar sus rutas de navegación.

"Trabajaremos en estrecha colaboración con las autoridades para encontrar la mejor combinación de puertos y tramos de cruceros que nuestros clientes demográficos busquen", explicó Nierenberg.

Según apunta la publicación, Victory Cruise Lines surgió de las cenizas de Haimark, que se declaró en quiebra a finales de 2015; Nierenberg solía trabajar allí y Victory I es el ex Saint Laurent. Desde su lanzamiento el año pasado, la línea ha estado navegando principalmente en los Grandes Lagos.

La empresa aún no ha determinado la fecha de inicio y los itinerarios para sus cruceros en Cuba; Nierenberg se encuentra actualmente en La Habana trabajando en los detalles.

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