Del cubo de la basura, a los laboratorios. Científicos norteamericanos han detectado propiedades curativas en la semilla del aguacate, que podría utilizarse para frenar el avance del cáncer en las personas que ya sufren esa enfermedad. En concreto han encontrado heptacosano en el corazón de esta fruta. Se trata de una sustancia que podría utilizarse para inhibir el crecimiento de los tumores.
Que el aguacate es bueno ya lo sabíamos los cubanos, que en la isla, en los meses de verano, acompañamos nuestra comida con este "bistec verde". Pero ahora en el Encuentro Nacional de la Sociedad Química Estadounidense, celebrado recientemente en Washington, los expertos han desvelado otras cualidades menos conocidas.
Según publica Juventud Rebelde, los investigadores molieron 300 cáscaras de semillas secas de aguacate y de ahí obtuvieron tres cucharaditas de aceite, en las que hallaron 116 compuestos, y 30 gramos de cera (16 compuestos). De algunos de ellos no se tenían noticias.
Lo más importante fue el hallazgo de heptacosano, que podría usarse para frenar la metástasis. Asimismo encontraron ácido dodecanoico, que aumenta las lipoproteínas de alta densidad y se cree que podría reducir el riesgo de padecer arterosclerosis.
A todo esto habría que sumar el uso que ya tiene el aguacate en la industria cosmética, para la producción de champú, perfumes y cremas, entre otros.
De los 5 millones de toneladas de aguacate que se producen cada año, los Estados Unidos consumen 2 millones. Hoy por hoy se le considera "la gema de gemas". Una joya.
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