En la zona de La Herradura, en Las Tunas, se construyen los dos parques eólicos más grandes de Cuba: La Herradura-1 y La Herradura-2, con financiación china.
Un amplio reportaje del Periódico 26 reveló que a principios del 2019 un circuito de La Herradura-1 comenzará a generar electricidad, aunque el cronograma final está supeditado a los procesos logísticos.
Según los expertos, La Herradura-1 generará aproximadamente 134.5 GW/h de electricidad al año, lo que permitirá ahorrar más de 37.600 toneladas de combustible y evitará la emisión de 116.032 toneladas de CO2 a la atmósfera.
Para ello se emplazarán 34 máquinas de 1,5 megawatt (MW) de potencia, con cinco circuitos. Sus aerogeneradores, con una altura de 65 metros, cuentan con palas de 37 metros.
La segunda instalación, La Herradura-2, generará 146.38 GW/h, economizará 40.098 toneladas de combustible y eliminará 126.056 toneladas de CO2. Este parque lo integrarán 20 equipos de 2.5 MW, casi el doble de potencia, con altura de 80 metros y aspas de 54 metros.
Es la primera vez en Cuba que se ejecuta una actividad ingeniera y constructiva de este tipo. Desde que se iniciaron las labores en 2013, los cubanos han debido superar problemas como la inestabilidad de un terreno cársico y el clima adverso.
Pero a la vez están convencidos de que el lugar, con corrientes de aire sostenidas de alrededor de 6.8 metros por segundo, a más de 50 metros de altura, es el más idóneo para un emplazamiento como este. También están orgullosos de ser los pioneros en una construcción de tal magnitud.
Ya se han edificado importantes obras civiles, como un vial de salida que será de uso exclusivo para el traslado de los equipos, un área de almacenaje temporal, un centro de apoyo logístico para impedir la contaminación de los áridos, y un laboratorio destinado a comprobar la calidad de los materiales y el producto terminado.
También se diseñó una subestación eléctrica de salida para extraer la energía de ambos parques que estará conectada al Sistema Electroenergético Nacional.
Aún está pendiente la compra de rastras de gran tamaño para trasladar los componentes y una grúa de 500 toneladas, destinada al montaje.
Según los expertos, en el 2030 el 24% de la energía en la Isla provendrá de fuentes renovables.
Alfredo López Valdés, ministro de Energía y Minas, explicó que el programa contempla producir 7.316 GW/h al año con dichas fuentes; ello posibilitará dejar de usar 1.75 millones de toneladas de combustible y eliminará la emisión seis millones de toneladas de dióxido de carbono a la atmósfera.
Dentro de la oferta general, la energía eólica representará el 6%, con 633 megawats. Para lograrlo se prevé la construcción de 14 parques; de ellos, tres son con créditos gubernamentales: los dos de Las Tunas y uno que se levantará en Río Seco I, Holguín, con fondos de la India.
Los otros 11 se erigirán gracias a la inversión extranjera: cuatro en Maisí, Guantánamo; cinco en Holguín; uno en Manatí, Las Tunas, y otro en Camagüey.
Una vez que entren en funcionamiento, a los inversionistas extranjeros se les comprará la energía y cuando hayan recuperado su inversión con las utilidades correspondientes, las instalaciones pasarán a integrar el patrimonio nacional.
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