Raúl Castro, jefe del Partido Comunista y del Ejército en Cuba, dijo este lunes que había que solucionar los problemas de la economía y que con ello se resolvería hasta la ideología.
"Todo lo que hagamos en este país en todos los sentidos, es resolver eso (la economía). Hasta gran parte de la ideología -dentro de los trabajos que ustedes tienen que estar realizando- se resuelve por ahí: resolvamos los problemas económicos fundamentales", dijo Castro en una reunión con dirigentes de la Isla entre los que se encontraba su sucesor en la presidencia, Miguel Díaz-Canel.
“Resolvamos los problemas económicos fundamentales. No estoy pidiendo que resolvamos cosas que resolveremos en el futuro indudablemente porque para llegar a ese punto hay que buscar recurso”, agregó.
En declaraciones citadas por la prensa oficialista, Castro explicó que era necesario “abrir la mentalidad y actuar con optimismo ante cualquier circunstancia” y lo ejemplificó con varios programas que desarrolla Cuba, entre ellos el turismo, sobre todo en la cayería al norte de la región central del país, Varadero, La Habana y Holguín.
Hizo también un llamado a la unidad porque según él, esta es “la principal arma”. En ese sentido recordó la caída de la unión Soviética y el Período Especial. En el caso de este último mencionó que por esos difíciles momentos hubo "manifestaciones de desaliento" entre algunos dirigentes.
“Hay que morir combatiendo, hay que luchar siempre con la frente en alto, porque esa ha sido nuestra principal convicción”.
Asimismo, insistió en la necesidad de continuar promoviendo mujeres y personas mestizas y negras a cargos decisorios en el país.
Castro, de 86 años, continúa al mando de Cuba. Las decisiones importantes recaen sobre él, según dijera el propio Díaz-Canel, designado por el Gobierno para el cargo de presidente.
La economía cubana está en crisis hace décadas pero en los años de mandato de Raúl hubo una apertura hacia los pequeños negocios privados. No obstante, su política ha sido abrir, pero sin prisas. De modo que cada vez que algo le molesta a la cúpula del poder, lo cierran.
Operado recientemente de una hernia, Raúl encabeza el grupo a cargo de modificar la Constitución cubana. Mientras, su hijo continúa a cargo de la lujosa finca que le están construyendo para su retiro en Santiago.
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