El padre de Lisandra Sánchez Expósito es cuentapropista desde hace 15 años. Todo este tiempo ha regentado un pequeño quiosco de comida en el parque del municipio holguinero de Cacocum, que está pegado a la terminal de ómnibus, muy cerca del ferrocarril, según recoge Juventud Rebelde.
Hace dos meses se pasaron las autoridades por su establecimiento y le dijeron, delante de la presidenta del Gobierno local, que tenía que reformar su quiosco, que era de hierro, y hacerlo de mampostería con sus propios medios. Le pusieron como fecha tope el 26 de julio, cuando el Partido Comunista de Cuba celebra el fallido asalto de Fidel Castro al Cuartel Moncada, en Santiago de Cuba.
El padre de Lisandra se puso a ello. Llevaba la obra a medio hacer cuando el pasado 6 de julio pasaron unos operarios y le informaron de que su quiosco va a ser demolido, "que esa era la orientación". Además, tuvieron la delicadeza de explicarle que no tenían ni idea de si lo iban a indemnizar o quién había tomado la decisión.
Lisandra considera que lo que han hecho con su padre es un "atropello". "Necesito ayuda para ver si podemos encontrar una solución a este problema que nos está afectando", escribió al diario oficialista.
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