Misael Valdés García, un cubano residente en Estados Unidos, viajó la pasada semana para visitar a su familia en la Isla y aprovechó para participar en el debate de la nueva Carta Magna que tuvo lugar en su barrio. Sus comentarios fueron apoyados por la mayoría, no obstante la policía le envió una citación al otro día.
Según cuenta a CiberCuba quiso ejercer su derecho como ciudadano cubano y decidió pedir la palabra para proponer modificaciones al anteproyecto de Constitución que se discute en la Isla.
Para él es sumamente importante que los cubanos de todas partes se impliquen en este proceso porque el Gobierno está “escribiendo la Ley del pueblo”.
Más allá de las consecuencias que esto le trajera "nada es más importante que el deber con mi patria", dijo.
Durante la citación, la policía se refirió a su propuesta de que en Cuba se apruebe el pluripartidismo y le dijeron que eso no sería posible "porque a ellos no les daba la gana".
Los oficiales le cuestionaron haber participado en el debate porque como residente en el extranjero debía hacerlo a través de la página web que la cancillería cubana habilitó para ello y le explicaron que logró hablar en su barrio porque "las personas que estaban en la mesa no tenían la preparación debida para impedirme asistir u opinar en la reunión".
Le preguntamos si sintió miedo, si lo reprimieron, si tomaron represalias con él o su familia. Hubo en su respuesta una idea recurrente, “no debemos perder la esperanza”.
“Hay que discutir, participar, proponer y no sentir miedo a ejercer nuestros derechos. La gente tiene que saber la verdad, porque la verdad nos hace libres. Y voy a Cuba otra vez en diciembre, seguiré intentando despertar a mi pueblo del letargo”, aseguró.
García hace una invitación a todos los cubanos, vivan donde vivan, a que se involucren con este proceso.
Hasta el momento no han citado a sus familiares y luego del debate, sus vecinos se comportaron con él como si nada. "La mayoría me da la razón", reclaca Valdés
Las propuestas de Misael en Placetas
“La anterior constitución de 1976 me fue impuesta porque yo solo tenía tres años cuando fue aprobada. Cada uno de los aquí presentes está escogiendo el futuro para sus hijos pequeños y nietos”, dijo una vez que le dieron la palabra en el debate.
Seguidamente Misael mencionó varios de los artículos que en su opinión deben ser modificados e hizo especial hincapié en la necesidad de una sociedad pluripartidista.
“Ninguna constitución puede hacer mención a un partido (PCC) en específico porque si lo hace está discriminando, reprimiendo e imponiendo. Tampoco hacer mención a una ideología política. No puede ser ilegal pensar, expresar, reunirse y hacer protestas pacíficas en contra del PCC y validar la legalidad de reprimir y hasta matar por una ideología política (socialismo)”, dijo.
“Propongo el pluripartidismo como existió cuando se peleó para tumbar a Batista. Los jóvenes que dieron su vida por Cuba Libre que pertenecían al Movimiento Estudiantil Universitario eran del Partido Ortodoxo y Liberal. El PCC no existía”, agregó.
Misael cuenta que las muchachas que estaban a cargo de la reunión escucharon sus propuestas sin intentar silenciarlo. “Solo la persona que leía el anteproyecto me replicaba”, explica.
Muchos de los presentes le apoyaron, otros le hicieron preguntas porque no entendían para qué Cuba necesita más de un partido político. También hubo quienes relacionaron sus propuestas con el líder opositor Jorge Luis García Pérez “Antúnez”.
Su respuesta fue clara: “no es posible que lo que hace Antúnez signifique un peligro para ustedes”.
“Su ilegalidad es porque no tiene un espacio en la sociedad y por ello que lo reprimen. Le cierran la cuadra y le pintan la fachada de de su casa de negro con el propósito de callar sus voz, que exige una sociedad mejor”.
Pero insistieron en que ellos tenían sus propios líderes y pusieron como ejemplo a los delegados de la circunscripción. “Les dije que no dudaba para nada de la competencia de ellos pero que no tenían contrincantes porque no le dan oportunidades a quien piense diferente”.
Asimismo criticó otros artículos contenidos en la nueva Carta Magna que pretenden convertir a los opositores en prisioneros de conciencia. “El concepto de traición a la patria es una aberración, viola los derechos humanos y discrimina la dignidad de cada cubano”, dijo.
Valdés García también pidió que Cuba reconozca el derecho a tener dos ciudadanías, a la unión de dos personas del mismo sexo y dedicó unos minutos a hablar sobre la posibilidad de que el país reconozca la eutanasia como un derecho constitucional.
“Tuve que explicar primeramente el significado del término porque la mayoría de los presentes no tenían idea de a qué me refería.
En ese sentido recalcó que antes de pasar a aprobar esa ley “hay que dejar de matar lentamente al pueblo con la pésima alimentación, exceso de químicos y aire contaminado de fundiciones y cigarrillos sin filtro y bebidas inapropiadas”.
En una publicación que compartió en su perfil de Facebook concluyó diciendo que "la patria no es un Partido, no es el gobierno, no es un líder. La patria es la tierra que nos vio nacer crecer y nos va a ver morir. La patria son sus campos, ríos y mares. La patria es el hogar con la familia, amigos y conocidos. La patria son los símbolos, las costumbres e idiosincrasias. La patria es la música, el canto, es la alegría de sentirse cubano, reír y disfrutar del aire puro y limpio que recorre toda la Isla".
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