La Habana, 16 nov (EFE).- La Asamblea Nacional del Poder Popular (Parlamento unicameral) de Cuba expresó este viernes su "más enérgico rechazo" a una resolución del Parlamento Europeo (PE) sobre la situación de los derechos humanos en la isla, que calificó como "inaceptable" y que tergiversa totalmente la realidad del país.
La resolución sobre Cuba adoptada el jueves por el Parlamento Europeo (PE) es "contraria a los principios de respeto, igualdad y reciprocidad" del Acuerdo de Diálogo Político y Cooperación (ADPC), según la declaración de la Comisión de Relaciones Internacionales de la Asamblea Nacional cubana.
La UE, sus Estados miembros y Cuba firmaron en 2016 el ADPC, el primer marco legal para regular sus relaciones, que entró en vigor provisionalmente en noviembre de 2017 y marcó el fin del aislamiento del país latinoamericano como el único de la región con el que el la UE no tenía aún un pacto bilateral.
"Manipulando la cuestión de los derechos humanos en Cuba y supuestas preocupaciones sobre el actual proceso de reforma constitucional, tratan de difundir una imagen falsa de nuestro país para obstaculizar la exitosa implementación" del ADPC, sostiene la declaración divulgada en la página web de la Asamblea Nacional.
En la resolución aprobada por el pleno del PE, los eurodiputados "lamentan" que "no haya mejorado la situación en materia de derechos humanos y democracia pese a haberse adoptado un acuerdo con la UE", y piden cumplir las obligaciones vinculantes sobre respeto a los derechos humanos y libertades fundamentales so pena de que se aplique su cláusula de suspensión.
El texto insta al Gobierno cubano a que redefina su política de derechos humanos adaptándola a la legislación internacional y reclama que esa nueva normativa permita, sin imponer restricciones, que toda la sociedad civil y los miembros de la oposición política participen activamente en la vida política y social.
Además considera que el proceso que se sigue actualmente en Cuba para reformar la Carta Magna "carece de los elementos de inclusión, tolerancia y respeto de los derechos civiles y políticos fundamentales que podrían garantizar un proceso constitucional democrático".
La Asamblea Nacional de Cuba asegura que la resolución promovida por las fuerzas conservadoras y liberales de la Eurocámara se basa en "mentiras fabricadas" y difundidas por personas que no son defensores de los derechos humanos (...) y que califican como "agentes asalariados de una potencia extranjera".
"No tiene ningún derecho el Parlamento Europeo a juzgar la democracia cubana, que es genuinamente participativa y popular, como demuestra el actual proceso de consulta popular a que se ha sometido el proyecto de nueva Constitución", subraya.
Asimismo sostiene que en Cuba "no existen allanamientos, detenciones arbitrarias, actos de acoso o intimidación, no existen desaparecidos, ni torturados, ni tampoco presos políticos o de conciencia" y que su legislación nacional incluye "las garantías del debido proceso, que se cumplen sin discriminación alguna".
La declaración recalca que Cuba ha demostrado su voluntad de intercambio en los diálogos sobre derechos humanos con la UE sobre la base del "respeto mutuo, la igualdad soberana y la no injerencia en los asuntos internos", los cuales han contribuido a un "mejor entendimiento" de las respectivas realidades y posiciones en esta materia.
También manifiesta su rechazo al intento de condicionar la implementación del ADPC, así como de promover la injerencia de las instituciones de la UE y sus estados miembros en los asuntos internos cubanos, e insta al PE a emplear sus esfuerzos y capacidad de influencia para condenar el bloqueo económico, comercial y financiero que aplica Estados Unidos a la Isla.
La Asamblea Nacional cubana reitera su disposición a desarrollar relaciones de respeto con el PE, pero advierte de que "siempre defenderá el derecho del pueblo cubano a decidir su propio sistema político, económico y social, sin injerencias de ninguna índole".
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