Un edificio en ruinas habitado por personas "ilegales" ha sido el tema de disputa en una reciente carta publicada en el medio oficialista Juventud Rebelde. La misiva, enviada por Ana Elizabeth Torres Cueto, una residente del municipio de Centro Habana, describe la peligrosa situación en que vive, por causa de ese deteriorado inmueble.
Según Ana, su casa -localizada en la calle Trocaderos- colinda con el edificio de tres pisos, que desde 1998 ha sido declarado inhabitable e irreparable. Además, comenta que durante años “ha habido desprendimientos del edificio sobre la casa”.
Hace dos años, uno de los desprendimientos dañó el techo de vigas de madera de su hogar. Al pedir ayuda a la empresa estatal Secons, estos le dijeron que no podían apuntalar la edificación porque no había madera. El tiempo pasó pero la respuesta seguía siendo la misma, ya que el material “no entraba” o se acababa con rapidez.
En mayo de 2018, otros pedazos del edificio cayeron sobre el cuarto de Ana que, afortunadamente, no se encontraba en casa. A raíz de esto, la habanera y su familia realizaron denuncias a disímiles instituciones estatales, incluido el Gobierno municipal de Centro Habana, pero tampoco hubo respuesta.
Mientras todo esto ocurría, el derruido edificio comenzó a ser habitado por personas que no tenía residencia legal ahí.
En junio del pasado año dos trabajadores del Grupo de Diagnóstico y Emergencias de la Dirección Municipal de la Vivienda visitaron la edificación. Según comentó Nelson Tamayo Carrillo, director municipal de la Vivienda en Centro Habana, en una reciente entrevista ofrecida al medio, los técnicos lograron comprobar el estado del inmueble.
Tamayo indicó que, efectivamente, el edificio necesitaba “una demolición oportuna”, pero no se había realizado hasta la fecha, porque era necesario “extraer y reubicar a las personas que habitan el mismo”.
“La demolición está planificada para el primer trimestre del presente año, la misma dependerá del proceso de declaración de ilegal que se iniciará de inmediato contra las personas que no tienen un estatus legal en el inmueble de referencia”, añadió.
Los problemas de vivienda en Cuba son cada vez más evidentes. Según analistas hay un déficit de 600.000 viviendas . En la última década, el número de casas edificadas ha caído un 20%.
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