Cuba ha prohibido la pesca, consumo y comercialización del pez guasa (Epinephelus itajara), una especie amenazada por la sobrepesca y la contaminación a nivel mundial.
La prohibición entró en vigor desde diciembre del año pasado mediante la Resolución No. 178/18 y responde al Código de Conducta para la pesca responsable, según lo establece el Ministerio de la Industria Alimentaria, informó el medio oficialista Escambray.
La ley aclara que los peces de esta especie atrapados de manera accidental deben devolverse al mar.
La carne de este peculiar animal, que puede llegar a pesar hasta 455kg, es apreciada en diversos lugares del mundo y altamente cotizada por su sabor.
Cuba ha limitado así mismo el trasiego de otras especies marítimas, las cuales están protegidas por regulaciones de extracción, desembarco, transportación, procesamiento, venta o consumo, en algunos casos, de manera permanente y, en otros, en dependencia de autorizaciones estatales.
Entre las especies amenazadas, Cuba incluye el manatí, el delfín, el cocodrilo y el caimán, el carey, la tortuga, la caguama y el tinglado.
También está vetado remover de su ecosistema a la jicotea, el coral negro y el cobo. Asimismo, se considera ilegal recolectar, conservar o vender huevos de tortugas marinas.
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