El ministro de Relaciones Exteriores de Cuba publicó un mensaje en su cuenta de Twitter en el que pareciera intentar congraciarse con la diáspora cubana y describir una relación que no existe.
En él señala que el MINREX “ reconoce, valora y cuenta con la labor de los cubanos residentes en el exterior”.
A la idea, Rodríguez Parrilla agregó que su ministerio continuará “fortaleciendo y estrechando las relaciones con nuestros nacionales en el exterior” en un proceso que calificó de “continuo, irreversible y permanente”.
Así mismo el canciller de Cuba hizo referencia al diálogo que sostuvieran las autoridades cubanas con la diáspora en el año 1978 como el inicio de una “política de acercamiento” entre el Gobierno y aquellos que viven fuera del país.
Mencionó que diversos encuentros realizados en los últimos años, así como el debate del proyecto de Constitución cuando residentes en el extranjero opinaron a través de internet, “evidencian el fortalecimiento de estos vínculos”.
Las opiniones de los residentes fuera del país hacia el diplomático no tardaron en sucederse y han sido, fundamentalmente, de crítica y alusivas a reiterados criterios despectivos e irrespetuosos que se han generado desde la misma cúpula del poder administrativo y político de la isla hacia la comunidad de cubanos en el exterior.
Uno de los que le respondió escribió: “Yo me fui por culpa de la política dictatorial que rigen en mi país”.
Por su parte otra persona le hizo las siguientes preguntas: “¿En qué quedamos entonces?¿Tenemos derecho a criticar aquello o solo nos valoran y reconocen por el billete que mandamos?”, en clara alusión a las recientes declaraciones de la ministra de Educación, Ena Elsa Velázquez, quien escribió Twitter: que “los que no viven en Cuba no tienen derecho a criticarnos”.
Pero no ha sido esta la única frase contra la diáspora que ha salido de aquellas personas cercanas al poder. El periodista Randy Alonso Falcón en el 2016 se refirió al atleta Orlando Ortega como un “ex-cubano”, luego de que este decidiera representar a España en los Juegos Olímpicos de Río 2016.
Pero quizás la expresión más criticada salió del propio Díaz-Canel, quien calificó de “mal nacidos por error” a aquellos que hoy no están en el país y critican la gestión administrativa llevada a cabo por él.
Palabras como gusanos, mercenarios, apátridas, traidores o vendepatrias, han sido comúnmente usadas por aquellos simpatizantes del régimen cubano, promovidas por dirigentes y funcionarios cubanos que desde el poder se sienten superiores al resto de los cubanos.
Por ello el tweet de Rodríguez fue prontamente refutado por quienes se sienten vilipendiados por las autoridades cubanas, pero utilizados como una manera de hacer que entre dinero al país a través de las remesas familiares, que en los últimos diez años han ingresado a la isla más de 29 mil millones de dólares.
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