La situación de los presos Maikel Delgado Aramburo y Harold Alcalá Aramburo, quienes fueron condenados a cadena perpetua por el intento de secuestro de la lancha de Regla en 2003, entró en un nuevo escenario después de que el Ministerio de Justicia de Cuba admitió a principios de octubre el procedimiento especial de revisión solicitado en mayo pasado por Julia Estrella Aramburo Taboas.
Por primera vez en más de 15 años, el gobierno cubano admitió este recurso que pidieron la madre y tía de Delgado Aramburo y Alcalá Aramburo, respectivamente, según informó el martes Diario de Cuba.
"Es un paso porque ya en más de una ocasión en años anteriores habían rechazado este procedimiento. Esas condenas fueron muy injustas y no estuvieran ajustadas a las propias leyes del régimen. La presión internacional por esta causa ha sido muy grande y constante. Es una pequeña victoria", señaló Estrella Aramburo.
En mayo la Fiscalía rechazó revisar la causa. El representante del Ministerio Público, Dixán Fuentes Guzmán, consideró que el enjuiciamiento que hizo el tribunal en su día fue ajustado a derecho.
En 2013 Taboas pidió al entonces dirigente de la Isla Raúl Castro que le concediera un indulto a su sobrino y su hijo. Para ello defendió que la condena que les impusieron era excesiva al no registrarse muertos y heridos.
El abogado independiente y asesor del caso Edilio Hernández dijo al citado medio que, "para que se ejecute este proceso, el Ministerio de Justicia ha pedido la sentencia original, la cual le haremos llegar esta semana".
"Además de eso, solicitaremos nuevamente un indulto a Miguel Díaz-Canel, pues no cejamos en nuestro empeño de justicia", agregó.
Por los hechos sucedidos el 2 de abril de 2003, los jóvenes Lorenzo Enrique Copello, Bárbaro Leodán Sevilla García y Jorge Luis Martínez Isaac fueron fusilados.
Otros cuatro fueron condenados a cadena perpetua. Además de Alcalá Aramburo y Delgado Aramburo, fueron condenados Ramón Henry Grillo y Yoanny Thomas González.
Al resto de los acusados les impusieron condenas que oscilaron entre los 30 y los dos años de prisión. Wilmer Ledea Pérez (30), Ana Rosa Ledea Ríos (5), Yolanda Pozo Rizo (3) y Dania Rojas Góngora (2).
Lo ocurrido en 2003 tuvo lugar en medio de un tenso ambiente conocido como la Primavera Negra, que condenó a 75 disidentes a elevadas penas de prisión y puso sobre el panorama legal la conocida Ley Mordaza.
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