En el siglo XXI la mayoría de la población mundial socializa en las redes sociales. En Cuba tenemos “pequeñas limitantes”, por eso para muchos cubanos Facebook, WhatsApp, Twitter, Instagram, no llegan a superar la interacción vívida de la cola de Coppelia.
¿Quién inventó Coppelia?
Empecemos por recordar que es el nombre de un ballet, uno que le gustaba a Celia Sánchez Manduley, quien en 1966 ocupó un importante puesto en el gobierno revolucionario. Era una mujer obsesionada con que todo fuera grande, público, útil y bello.
¿Por qué una heladería tan grande?
La Habana tiene una temperatura habitual de 30ºC, lo que invita a tomar helado o beber cerveza. Un bar para mil personas traería grandes ganancias, pero sería un desastre en medio de la ciudad, por eso tenemos una heladería con diversas entradas y varias ofertas.
¿Quién diseño esta obra?
El arquitecto Mario Girona es su autor y tuvo el apoyo de otros dos colegas de oficio, Rita María Grau y Candelario Ajuria, además de dos ingenieros civiles Maximiliano Isoba y Gonzalo Paz.
Fue una obra que se diseñó y construyó en tiempo récord. Está hecha con hormigón armado.
¿Qué hacer si alguien te invita a Coppelia?
Si alguien te invita no sufras, decodifica el mensaje y asume que ese “alguien” te quiere. Una cola de entrada en Coppelia puede demorar entre treinta minutos, si no hay helado de chocolate, y dos horas y media, si lo hay. “Alguien” te ha dicho: ¡Quiero escucharte, me interesas!
¿De cuánto tiempo dispongo para convencerle de lo que pienso?
Tras la cola de entrada tendrás 15 minutos extra para ser atendido. Das tu pedido, generalmente de ensalada y consigues otros 15 minutos para que las bolas lleguen a tu mesa. Si estuvieras ese tiempo conectado a Internet, en Cuba, el daño económico sería irreparable.
¿De qué habla la gente durante tanto tiempo?
Este punto depende de con quién vas a Coppelia. Evita ir con tu jefe, o terminarán sabiendo cada uno más de lo debido sobre la vida del otro. No vayas con alguien con quien tengas mala onda, porque la espera puede exasperar.
¿Con quién ir a hacer cola en Coppelia?
Ve con una amiga o amigo, de ser posible con alguien con que lleves mucho tiempo sin conversar. Aunque también es genial ir solo, porque conoces gente nueva en la cola y hasta puede que hagas amistades. Pero lo mejor es invitar a esa persona a la que “le echaste el ojo”.
¿Qué puedo hacer si me aburro en la cola?
Puedes colarte. Eso activa a la gente y te dirán algunas ofensas, mientras otros harán la vista gorda porque les interesa más lo que conversan que la propia cola. Tú tendrás por tu parte un subidón de adrenalina increíble por desafiar lo establecido. Si lo logras, claro.
¿Qué hago si llego a sentarme y quitan mi sabor de la tablilla de productos?
Piensa que esto es habitual. No es el karma ni el universo conspira en tu contra. Eso te pasa a ti y a las otras 999 personas que están en el mismo recinto. En Coppelia te puede sorprender la maravilla, pon pensamiento positivo y quizás te toque una fresa.
Si no fuera así no te rindas, siempre habrá otra cola que conquistar en La Habana.
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