El boliviano Marco Pumari, líder de un comité cívico que apoyó la reciente salida del poder del presidente Evo Morales, denunció este miércoles que en su país existió “una operación conjunta” de Cuba y Venezuela para atentar contra la población que se manifestó contra el derrocado gobierno.
Entrevistado por CNN, Pumari reveló que se han detenido en algunos departamentos del país, a personas cubanas y venezolanas que se han podido identificar.
“Claramente demuestran que ha existido una operación conjunta, una operación que no solo la han ejecutado militantes de acá, del movimiento socialista. Los videos que se han podido extraer muestran que hubo cubanos que vinieron aquí a instruir a los campesinos”, recalcó.
Según relató el dirigente, una caravana de mineros que se aproximaba a la sede del gobierno fue “vilmente atacada por francotiradores” que fingían ser integrantes de las comunidades indígenas.
“Ahí hemos podido diferenciar en algunas imágenes que ha habido disfrazados, gente de tez blanca que estaban disfrazadas, disparando a la integridad de la caravana de mineros que se aproximaba a la ciudad de La Paz. Son francotiradores, no creo que eran campesinos porque estaban a una distancia de mil metros en algunos casos, con la intención de matar a los mineros”, detalló.
Las declaraciones de Pumari se realizan el mismo día antes de la detención de cuatro funcionarios cubanos por la policía boliviana, acusados de organizar y financiar protestas contra el gobierno interino de la exsenadora Jeanine Añez y a favor del retorno del expresidente Evo Morales.
De acuerdo con los documentos de identidad para extranjeros, a los cuales tuvo acceso CiberCuba, tres de los cuatro detenidos forman parte del personal técnico de la Embajada de Cuba en la nación andina, como integrantes de la Brigada Médica Cubana que brinda servicios allí.
La denuncia registrada ante las autoridades locales indica que los arrestados conducían un vehículo donde se halló una mochila con 90.000 bolivianos (equivalentes a unos 13.000 dólares), aunque otros reportes no oficiales cifran el dinero incautado en más de medio millón de bolivianos (unos 74.000 dólares).
La policía boliviana sostiene que los cubanos forman parte de un complot que comandaba y pagaba a partidarios del expresidente para diseminar protestas violentas en la capital. De acuerdo con la misma fuente, los arrestados iban detrás de las turbas que este miércoles bajaron de la ciudad de El Alto hasta La Paz y protagonizaron otra jornada violenta de protestas y enfrentamientos con la policía.
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