Desde hace más de un año la carnicería Martí, en Santiago de Cuba, no cuenta con equipos de refrigeración para mantener la calidad de los productos.
Así lo denunciaron a CubaNet tanto los clientes, como la administradora o el propio carnicero, quienes no saben qué hacer ante la falta de neveras o cámaras de refrigeración.
Un cliente declaró que el gobierno no hace el intento de reparar los refrigeradores con que cuentan, aunque están en muy malas condiciones.
Otro de los problemas que plantea es que nunca hay un carnicero estable: "Como cambian tan seguido de carnicero no hay a quien reclamarle", sostiene.
Por su parte, Niobis Arcias, quien es la administradora de la carnicería hace un mes, dice que todo lo que entra debe venderse al momento, de lo contrario los productos se echan a perder.
Otros clientes han dicho que en ocasiones algunos productos como el picadillo se los han vendido con mala calidad por la falta de refrigeración.
No obstante, no es la primera vez que se denuncia la falta de refrigeración en establecimientos, que perjudica a los cubanos en un contexto donde normalmente la carne escasea.
En una ocasión, una embarazada en Cuba recibió la carne de res que le corresponde como dieta en muy mal estado, hasta el punto de haber tomado una coloración verde.
Asimismo, en la provincia de Villa Clara se reportaron intoxicaciones alimentarias, que dejaron como saldo un centenar de enfermos, debido a "la mala higiene del manipulador de alimentos, por violar las normas básicas para la conservación, o una deficiente congelación o descongelación de los productos".
Otra denuncia llegó también desde Santiago de Cuba, donde un establecimiento estatal ofertó "carne podrida" a la población, ya que la carnicería no contaba con refrigeración para mantener en buenas condiciones los productos.
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