Uno de los pasajero del crucero Coral Princess falleció por la enfermedad causada por el coronavirus en un hospital de Hialeah, informó la oficina del alcalde del condado de Miami-Dade.
"Una sexta persona fue transportada el sábado por la noche en ambulancia privada después de una evaluación médica realizada por la línea de cruceros. Lamentablemente, la persona murió más tarde en un hospital local en Hialeah", apunta el comunicado publicado en la página de Facebook del alcalde Carlos A. Giménez en la noche de este domingo.
El crucero Coral Princess arribó este sábado al Puerto de Miami con dos fallecidos por la COVID-19 y otros enfermos por esta enfermedad que continúa sin cura.
El fallecido sería la tercera muerte resportada en ese crucero por coronavirus.
Hay otros dos pacientes críticos ingresados en el Hospital Larkin y otros tres en un hospital del área de Tampa. Así mismo, el Departamento de Bomberos de Miami-Dade trasladó a otros 8 pacientes a hospitales locales.
Princess Cruises pertenece a Carnival, una compañía de cruceros que tiene su sede en Miami. Carnival tiene acuerdos con los hospitales locales y una compañía privada de ambulancias para transportar a los pasajeros que necesiten atención de emergencia, apunta la nota.
El condado de Miami-Dade dio la autorización para el desembarco del crucero Coral Princess con 1.720 personas a bordo, tras la prohibición en países como Argentina y Brasil. En el comunicado señalan que están listos "para responder cuando las condiciones lo justifiquen".
Los restantes pasajeros de este crucero están siendo investigados para proceder si están sanos al traslado en un autobús hasta un área especial de Aeropuerto Internacional de Miami. Allí tomarán vuelos chárter, "coordinados por la línea de cruceros", aclara la fuente, a sus respectivos países. Los primeros serán los pasajeros de California (EE.UU.), Australia y Reino Unido.
La compañía lamentó en un comunicado que las nuevas restricciones impuestas por los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés) de no usar transportes ni vuelos comerciales retrasen el transbordo de los más de 1.000 pasajeros y más de 800 miembros de la tripulación.
"Princess Cruises continúa trabajando incansablemente para ajustar el plan de repatriación para cumplir con los nuevos requisitos de los CDC. Lamentablemente, esto provocará más demoras en el desembarco y el viaje hacia adelante para muchos huéspedes a medida que trabajamos en esta situación compleja, desafiante y desafortunada", afirman.
Por su parte, el condado de Miami-Dade apunta que en el Puerto de Miami se toman todas las medidas para evitar contagio de coronavirus, entre ellas el envío de personal médico de Jackson Health, entre ellos un médico y enfermeras.
"En el Puerto de Miami, la seguridad y la salud de los usuarios del puerto, incluidos los pasajeros, los miembros de la tripulación y nuestra fuerza laboral son una prioridad", agrega.
El Coral Princess tenía previsto desembarcar en Buenos Aires el 19 de marzo, pero en Argentina se decretó el cierre de fronteras por aire y tierra, lo que imposibilitó el traslado de los pasajeros.
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