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Investigan a funcionarios de Inmigración en Uruguay que dejaron entrar cubanos a cambio de dinero

La supuesta red de tráfico de personas incluía a choferes de uber, taxis y autos de alquiler que llevaban a los cubanos a la frontera uruguaya desde Brasil.

Cubanos en Uruguay © Cubanos en Uruguay/ Facebook
Cubanos en Uruguay Foto © Cubanos en Uruguay/ Facebook

Este artículo es de hace 3 años

Varios funcionarios de la Dirección Nacional de Migración de Uruguay están siendo investigados por su participación en una presunta red de tráfico de personas, entre las que habría numerosos cubanos, en la frontera con Brasil.

Empleados de la Dirección de Migración, dependiente del Ministerio del Interior, están bajo escrutinio dentro del propio organismo, luego de que en marzo pasado un subcomisario acusara a varios policías de recibir dinero por dejar pasar a cubanos que entran al país desde Brasil sin papeles.

El propio ministro del Interior, Jorge Larrañaga, ha declarado que está al corriente del caso.

Según una información del portal web Subrayado, se cree que los extranjeros llegan al territorio brasileño en avión desde Guyana.

En la ciudad de Porto Alegre se involucran en una red de tráfico de personas en la que participan choferes de uber, taxis y autos de alquiler que los trasladan en grupos de hasta siete personas hacia la frontera uruguaya, donde se supone que son recibidos por funcionarios de este país austral les permiten acceder, a cambio de dinero.

Subrayado contactó con uno de estos cubanos, quien de manera anónima relató su experiencia.

Como muchos de sus compatriotas, el hombre contó que salió de Cuba hacia Guyana, país que no les exige visado y en el que pueden estar legalmente durante siete días hábiles.

“Pero muchos de nosotros emigramos y seguimos brincando frontera para llegar a un país como es Uruguay, que nos permite la entrada”, precisó.

Para poder llegar, hacen una travesía desde Guyana con un coyote que les cobra 1.200 dólares por persona.

“Esa plata se le entrega a una persona que nos recibe en el aeropuerto de Guyana y se encarga de ir manejando que otra persona nos lleve a la frontera” detalló.

En la frontera con Guyana comienza un periplo que incluye una avioneta, un ómnibus y por último un taxi.

“Nunca nos llevan a la frontera a pedir asilo, esas cosas las hacemos nosotros solos”, dijo.

El principal riesgo es “que esa poca plata la podemos perder en ese momento en Guyana”, concluyó.

Esta organización de trata de personas también está siendo investigada por la Fiscalía de Uruguay.

Ante esa instancia se presentó un subcomisario para denunciar que los funcionarios de la Inspectoría de la ciudad de Chuy, en el departamento de Rocha, junto a la frontera con Brasil, son sobornados para permitir el ingreso de cubanos al país.

Richard Perdomo acusó a una oficial con grados de cabo de falsificar una firma para iniciar el trámite de residencia de un ciudadano cubano que no tenía visa en 2018, una situación que calificó “irregular de apariencia delictiva”.

Según la denuncia, la cabo no tenía autorización para entrar al sistema de inicio electrónico de residencia y por ello falsificó la rúbrica de un superior, lo cual aseguró el acceso al territorio a un cubano de apellido Agramonte.

“Se tiene conocimiento mediante información anónima, que funcionarios de la Inspectoría de Chuy cobraban una importante suma de dinero a ciudadanos cubanos para iniciar el trámite de residencia, para poder obtener la cédula de identidad de residente en trámite”, dijo la carta enviada a la Fiscalía.

La situación fue confirmada por la alcaldesa de la localidad, Mary Urse, quien relató a Subrayado que estos casos han sido denunciados varias veces por los propios emigrantes.

“Nosotros lo hemos denunciado 500 mil veces y no le echen la culpa a la pandemia, porque esto está desde el principio que empezaron a entrar cubanos. Cubanas que fueron a la comisaría, denunciaron, que dieron nombres, cómo los trajeron. Les hacen vender todo, les cobran todito y hasta vinieron descalzos. Para mí es una trata de personas que se está haciendo, pero que hasta ahora, nadie ha hecho nada”, cuestionó Urse.

En los últimos meses el gobierno de Uruguay ha mostrado su preocupación por la llegada ilegal de cubanos a su territorio, debido que podrían haber contraído el coronavirus en el trayecto. La travesía desde Guyana hasta Uruguay, y sobre todo su paso por Brasil, inquieta a los funcionarios de Migración porque el gigante sudamericano es el más afectado por la pandemia en América Latina.

En junio dos cubanos que no fueron identificados dieron positivo al coronavirus cuando intentaron cruzar la frontera. Los afectados, una mujer y su hijo, formaban parte de un grupo de seis personas que al momento de informar la noticia permanecían en el lado brasileño de la ciudad de Chuí, donde las autoridades locales los mantenían aislados en una casa para evitar más contagios.

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