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Fallece una embarazada de 32 años en EE.UU por coronavirus, pero su hijo sobrevive

Esta es la segunda embarazada que muere por coronavirus en California.

Hospital de Estados Unidos (Imagen referencial) © Tricare.mil
Hospital de Estados Unidos (Imagen referencial) Foto © Tricare.mil

Este artículo es de hace 3 años

Una mujer embarazada de 32 años de California falleció por coronavirus, pero los médicos lograron salvar la vida del bebé, quien dio negativo al test de diagnóstico del Covid-19, aunque aún permanece ingresado.

El hecho ocurrió el pasado 26 de junio, aunque fue esta semana que lo dio a conocer el Departamento de Salud Pública del condado de San Bernardino.

La fallecida, de quien no se reveló su identidad, vivía en la ciudad de Hesperia y presentaba condiciones de salud subyacentes.

El recién nacido se encuentra en la unidad de cuidados intensivos neonatales del Centro Médico Regional Arrowhead, donde evoluciona satisfactoriamente.

“Este trágico evento nos recuerda a todos la gravedad de Covid-19, especialmente para los miembros vulnerables de nuestra comunidad, como los que están embarazadas”, dijo la doctora Erin Gustafson, oficial de salud en funciones del condado.

“Nuestros corazones están con su familia en este momento de duelo”, añadió.

Esta es la segunda embarazada que muere por el coronavirus en California, según las autoridades sanitarias. La primera residía en Los Ángeles y falleció a inicios de junio.

En el condado de San Bernardino se han detectado hasta ahora 72 contagios en mujeres encinta desde el comienzo de la pandemia.

Los Centros para el Control de Enfermedades advierten que “las mujeres embarazadas pueden tener un mayor riesgo de enfermedad grave por Covid-19 en comparación con las mujeres no embarazadas”.

Según el comunicado emitido, entre las féminas en edad reproductiva con Covid-19, el embarazo se asoció con la exigencia de hospitalización, un mayor riesgo de ingreso en la UCI y la necesidad de un ventilador.

Gustafson instó a las embarazadas a quedarse en casa el mayor tiempo posible. Si tienen que salir a la calle, usar siempre la mascarilla protectora, distanciarse físicamente de las demás personas y lavarse las manos con frecuencia.

A mediados de abril pasado Mary Agyeiwaa Agyapong, una enfermera embarazada de 28 años del Reino Unido falleció a causa del coronavirus, y al igual que el caso de California, el bebé logró sobrevivir tras una cesárea de emergencia practicada a la madre.

La occisa, que ya era madre de un niño de dos años, dio positivo al virus el 5 de abril y dos días después tuvo que ser internada en el mismo hospital donde laboraba.

Había trabajado hasta el 12 de marzo, cuando se acogió a la baja por maternidad. Hasta ese momento no tuvo ningún contacto directo con pacientes de coronavirus, por lo que se presume que se contagió fuera del centro.

Días antes una brasileña de 33 años se convirtió en la primera embarazada en fallecer por coronavirus en el gigante sudamericano. Se trataba de una fisioterapeuta que vivía en el Pernambuco y a quien una cesárea de urgencia permitió salvar la vida del bebé.

La mujer estaba en su semana 31 semanas de embarazo y era la madre de dos gemelas de cinco años.

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