El vicepresidente de EE.UU., Mike Pence, aseguró el miércoles que una victoria de Joe Biden en las elecciones de noviembre traería socialismo y decadencia al país, al tiempo que enfatizó la necesidad de preservar la seguridad y el éxito económico con la reelección del presidente Donald Trump.
“La dura verdad es que no estarán seguros en los Estados Unidos de Biden”, afirmó Pence en la tercera noche de la Convención Nacional Republicana, durante su discurso de aceptación a la nominación como vicepresidente.
Pence dijo que Biden es en realidad “el caballo de Troya de la izquierda radical”, y que recortará los fondos a la policía.
Reprochó al candidato demócrata que no haya dicho “ni una sola palabra” la pasada semana -durante la Convención Demócrata- “sobre la violencia y el caos que está arrasando las ciudades de este país”; y aseguró que "respalda las mismas políticas que están generando calles inseguras y violencia en las ciudades de EE.UU."
En medio de las crecientes protestas por el tiroteo el pasado domingo a un ciudadano afroamericano por parte de la policía de Kenosha (Wisconsin), Pence indicó que los comicios del 3 de noviembre suponen una elección entre “la ley y el orden” y la anarquía.
“Joe Biden dijo que estamos viviendo un período de oscuridad, pero como dijo el presidente Trump, donde Joe Biden ve la oscuridad estadounidense, nosotros vemos la grandeza estadounidense”, comentó en otro momento.
Pandemia y economía
"La semana pasada, Joe Biden aseguró que 'no va a venir ningún milagro' (contra el COVID-19). Lo que parece que Joe no entiende es que Estados Unidos es una nación de milagros, y que estamos en camino de tener la primera vacuna segura y eficaz contra el coronavirus del mundo para finales de este año", dijo Pence en relación con la situación de crisis creada por la pandemia.
"En nuestros tres primeros años, construimos la mejor economía del mundo. Hicimos a Estados Unidos grande de nuevo", dijo, en alusión al conocido lema de campaña del presidente; "Y entonces llegó el coronavirus desde China".
Pence defendió que el veto a la entrada de extranjeros desde China que impuso Trump "salvó un número incontable de vidas estadounidenses", y describió su respuesta a la pandemia como "la mayor movilización nacional desde la Segunda Guerra Mundial".
El vicepresidente ha asegurado que la elección del 3 de noviembre será entre "un político de carrera que presidió la recuperación económica más lenta desde la Gran Depresión" (en alusión a Biden) o "un líder demostrado que creó la mayor economía del mundo".
"La elección está clara: para que Estados Unidos se recupere económicamente del todo, necesitamos cuatro años más del presidente Donald Trump en la Casa Blanca", sentenció.
“Nuestro país necesita un presidente que crea en Estados Unidos, que crea en la capacidad ilimitada del pueblo estadounidense para enfrentar cualquier desafío, derrotar a cualquier enemigo y defender las libertades que tanto apreciamos”, dijo Pence.
“Hace cuatro años respondí a la invitación para unirme a este programa porque sabía que Donald Trump tenía el liderazgo y la visión para hacer grande a Estados Unidos de nuevo”, dijo el exgobernador de Indiana ante la audiencia en el histórico Fort McHenry, en Maryland.
“Y durante los últimos cuatro años he visto a este presidente soportar ataques implacables y levantarse cada día, luchando para cumplir las promesas que hizo al pueblo estadounidense”, añadió.
“Así que con gratitud por la confianza que el presidente Donald Trump ha puesto en mí, el apoyo de nuestro Partido Republicano y la gracia de Dios, humildemente acepto su nominación para postularme y servir como vicepresidente de los Estados Unidos”, concluyó.
Tras el discurso, el presidente Donald Trump subió al escenario acompañado de la Primera Dama, Melania Trump, para unirse al vicepresidente mientras el público coreaba “¡Cuatro años más!”.
La intervención de Mike Pence cerró una noche en que fueron pronunciados varios discursos, incluyendo las intervenciones del exdirector de inteligencia nacional, Richard Grenell; de la segunda dama, Karen Pence, y de la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany.
El lunes los republicanos confirmaron la nominación como candidato a las elecciones de noviembre del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, durante la Convención del partido inaugurada en Charlotte, en Carolina del Norte.
La candidatura del actual presidente de EE.UU. obtuvo el respaldo abrumador de los delegados, durante una votación en la que participaron presencialmente 336 compromisarios, de un total de 1.276. Ese día, el empresario de origen cubano, Máximo Álvarez, dio uno de los principales discursos.
La Convención de los demócratas, donde se nominó oficialmente a Joe Biden para los comicios presidenciales, se desarrolló de forma virtual, mientras que la propuesta de los republicanos ha sido una mezcla de presentaciones remotas y presenciales.
Las convenciones se celebran cada cuatro años, y en ellas los dos partidos nominan oficialmente a sus candidatos presidenciales y son el punto culminante que da paso al tramo final de la campaña.
El presidente Donald Trump dará este jueves su discurso de aceptación durante la cuarta y última noche de la Convención Nacional Republicana.
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