La escasez de alimentos y otros productos vitales continúa siendo uno de los principales problemas para el cubano de a pie, que ni siquiera por la llegada de la pandemia de coronavirus puede llevar una vida normal y permanecer en su hogar cuidándose de un contagio.
El quedarse en casa no es una opción para millones de ciudadanos en la isla, que día tras día tienen que salir a las calles a tratar de conseguir algún alimento que poder llevar a la mesa.
Así lo atestiguó Yojander Pérez López, residente en Santiago de Cuba, quien el sábado publicó en su muro de Facebook varias fotos de colas en varios mercados para comprar artículos de primera necesidad.
“La primera por aceite, la segunda por galletas, la tercera por zapatos, aseo y aceite”, explicó.
“Estas colas fueron hoy en la mañana. ¿Hasta cuándo seguiremos en lo mismo?”, cuestionó.
El post de Pérez López ha recibido numerosos comentarios de personas que lamentan la realidad en la que tiene que sobrevivir el pueblo cubano.
“Por Dios, al menos si cuidaran el distanciamiento social, las personas no tienen percepción de riesgo”, expresó una mujer, en referencia a la necesidad de mantener una distancia mínima entre la gente para evitar contagiarse de coronavirus, algo que rara vez se cumplen mientras se espera para entrar a comprar.
Una enfermera residente en Miami expresó que la causa mucho dolor ver esas escenas. tan grande me da ver esto. “Nunca es más oscuro que cuando amanece, algo muy grande tiene que pasar ya. Es demasiado duro ver que ni la comida aparece”.
Por su parte, un joven del municipio Palma Soriano broméo diciendo que la culpa de todo la tiene el bloqueo.
“Tenemos bloqueos para muchas cosas. Pero mi pregunta es la siguiente: ¿Cuál es la causa de que en los hoteles de Cuba no haya bloqueos?”, respondió Pérez López.
La situación no tiene visos de mejorar en Santiago de Cuba, máxime cuando en los últimos días se han detectado varios casos de coronavirus.
Para tratar de evitar nuevos contagios, las autoridades han implantado un nuevo sistema de comercialización a partir de este lunes, en el cual los hombres y las mujeres no podrán comprar al mismo tiempo.
El Consejo de Defensa Provincial anunció que en los establecimientos en los que se venden productos de primera necesidad, el horario quedará de esta manera: los martes, jueves y sábados comprarán las mujeres, y los lunes, miércoles y sábados, los hombres.
Los domingos quedan para aquellos que pertenecen a los llamados grupos vulnerables, como las embarazadas y las personas con discapacidad, siempre que muestren el documento que los identifica.
También se estableció que en Santiago de Cuba solo sus residentes tendrán derecho a adquirir los bienes definidos como de primera necesidad, a excepción de quienes se encuentren laborando allí por períodos largos.
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