La villa de Sancti Spíritus atesora la segunda ermita construida por la devoción a la Virgen de la Caridad del Cobre en Cuba. Esta edificación data de 1727.
La Ermita de Nuestra Señora de la Caridad, en Sancti Spíritus, fue mandada a construir por el clérigo presbítero espirituano Silvestre Alonso y Muñoz (1670-1743), quien desempeñó una importante obra de asistencia social en beneficio de los humildes en el siglo XVIII.
El padre Alonso conoció el culto a la Caridad del Cobre cuando realizó su carrera eclesiástica en Santiago de Cuba. Al graduarse de sacerdote llevó la devoción por la Virgen hasta el centro de la Isla y proyectó la construcción de una ermita para ella.
La edificación tardó 10 años en construirse (1717-1727). Actualmente la Iglesia de la Caridad en Sancti Spíritus es la segunda construcción religiosa dedicada a la Virgen de la Caridad del Cobre en Cuba. Se ubica en la barriada Norte de la ciudad.
Alonso y Muñoz fundó además, con sus ahorros personales, el primer hospital de la villa y creó un convento que en su época fue centro de estudios, ilustración general y orientación de la juventud pobre.
Entre los documentos históricos que atesora esta parroquia se encuentra, por ejemplo, la Fe de Bautismo y el acta de matrimonio del Mayor General del Ejército Libertador Serafín Sánchez Valdivia (Sancti Spíritus, 1846-1896), luchador de las tres guerras por la independencia de Cuba.
La sacristía de la iglesia de la Virgen de la Caridad del Cobre en Sancti Spíritus mantiene las puertas originales de la edificación. Este edificio tuvo a lo largo de la historia varias modificaciones una de las más importantes es la torre del campanario que pertenece al siglo XIX.
La fundación de esta ermita hizo que se expandiera el culto a la virgen al occidente de Cuba y tuvo una importante repercusión en la espiritualidad del pueblo cubano y del Ejército Libertador.
A la Caridad del Cobre se le conoce como la Virgen Mambisa porque a ella se encomendaban los mambises antes de cada batalla. Una anécdota narra que Carlos Manuel de Céspedes, Padre de la Patria, se inclinó ante ella para orar poco tiempo después de comenzar la Guerra de Independencia.
Es tan significativa la devoción a la virgen entre los patriotas cubanos que los veteranos de las guerras de independencia escribieron a Su Santidad Benedicto XV pidiendo que declarara Patrona de Cuba a la Virgen de la Caridad del Cobre y así fue concedido el 10 de mayo de 1916.
En el año 2014, una imagen de la Virgen de la Caridad del Cobre fue colocada en los Jardines del Vaticano. Se trata de una copia en bronce de la efigie hallada en la Bahía de Nipe y adorada por el pueblo minero de El Cobre, una devoción que el padre Silvestre Alonso y Muñoz contribuyó a extender por toda Cuba.
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