Agentes de la Policía en Ciego de Ávila desarticularon una red ilegal de elaboración y venta de café molido, un producto cuya cuota estatal es insuficiente para la alta demanda de la población.
En uno de los operativos policiales que transmite la Televisión Cubana cada noche en el espacio del Noticiero, el mayor Jorge García López, jefe del DTI en esa provincia, dijo que dos individuos fueron detenidos y se decomisaron 45 sacos de maíz en grano, 7 sacos de maíz tostado y más de 2000 paquetes de café tostado, materia prima con la que laboraban la mezcla.
De acuerdo con la televisión oficialista fueron revisados 3 domicilios que se dedicaban a la venta ilícita del producto, y utilizaban para su confección maíz y chícharo, con pequeñas porciones de café.
También se incautaron dos tostadoras y dos molinos eléctricos artesanales, 850 Bolsas de nylon para empacar el grano y un saco de café molido sin envasar.
En la operación policial los agentes encontraron más de 5000 pesos cubanos en efectivo y 42 botellas de vodka compradas a desconocidos.
Actualmente los dos ciudadanos están detenidos bajo proceso investigativo.
Desde el inicio de la pandemia del coronavirus la televisión estatal ha transmitido casi a diario operativos policiales como este contra las supuestas ilegalidades en el país.
Una característica de esta saga detectivesca es que los malhechores son personas comunes tildadas de corruptas y a las que el Gobierno responsabiliza de la escasez que enfrenta la nación.
Casi nunca uno de estos espacios ha presentado un caso de corrupción donde el victimario sea un funcionario del gobierno o persona con algún cargo directivo en alguna empresa, muchas veces señalados por la población del país por sus delitos.
En un escenario de escasez generalizada, el régimen de Cuba ha aumentado la persecución de los revendedores, coleros y acaparadores en medio de la pandemia de coronavirus, a quienes sanciona con elevadas multas, años de cárcel y el decomiso de las mercancías.
Hace poco uno de estos episodios transmitió el desmantelamiento de una fábrica clandestina de producción de embutidos, los cuales eran preparados, envasados y vendidos a la población en el mercado negro.
Aunque el Gobierno asegura cumplir al 100 por ciento con la demanda de café de los cubanos, lo cierto es que la cuota que cada mes venden en las bodegas es insuficiente para la mayoría.
El café es uno de los productos alimenticios de mayor demanda y a pesar del optimismo que muestran las autoridades sobre su suministro, su ausencia en la red comercial se nota desde antes de la llegada de la pandemia.
Ello ha obligado a los consumidores a tratar de adquirirlo a precios muy elevados en las tiendas en divisas, o a recurrir al mercado informal.
Hace algunas semanas la prensa local de Las Tunas denunciaba que el café se había "perdido" de las cafeterías estatales y en algunos comercios de la ciudad se estaba comercializando a un precio más caro.
Mientras, continúan los operativos y los arrestos a ciudadanos que se dedican al acaparamiento y la venta ilícita de café.
En julio último otros dos operativos policiales concluyeron con la detención en Granma de varios ciudadanos que se dedicaban al traslado de café en grano y procesado, con el fin de comercializarlo en el mercado negro. Los infractores empleaban transportes estatales y de turismo para transportar la mercancía.
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