El Gobierno de Cuba ha identificado 1 145 ofertas exportables en todo el país, que incluyen mercancías y servicios producidos por el sector privado de la isla y que se ha convertido en una de las principales aspiraciones de la dictadura para ingresar dinero a las arcas del Estado.
La mayoría de esas ofertas exportables son mercancías (68%) mientras que el resto son servicios, aseguró Vivian Herrera, funcionaria del Ministerio de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera (MINCEX) en la isla, a la estatal agencia Prensa Latina.
Del total de exportadores potenciales identificados por el MINCEX, unos 418 pertenecen al sector privado y de ellos 308 a la rama agroalimentaria, aseguró la funcionaria.
Hasta el mes de septiembre la cifra de interesados en la exportación ascendía a dos mil. Herrera explicó que se han firmado unos 40 contratos para algún tipo de cooperación y que hay más de 159 convenios para importar a la isla materias primas e insumos que necesitarían las empresas privadas o estatales para incrementar o perfeccionar sus producciones.
Hasta el momento tienen identificado cinco territorios con las mayores potencialidades de exportación. Ellos son Pinar del Río, Artemisa, Granma, Las Tunas y el municipio especial Isla de la Juventud y los renglones exportables serían la producción de frutas, hortalizas, carbón vegetal, conservas, cítricos, calzado artesanal, muebles y artesanía.
Los contratos establecidos prevén que las entregas sean parciales durante todo el año, para garantizar la sostenibilidad de la oferta y la retención del cliente con la presentación de otros bienes, explicó.
De las 1 145 ofertas identificadas, ya hay consolidadas unas 700 que aportan importantes ingresos económicos al Estado, como la producción de carbón vegetal, que genera unos 40 millones de dólares al año, según datos oficiales.
La funcionaria cubana explicó que un alto número de personas que ofrecen servicios relacionados con la informática también han mostrado su interés en la posibilidad de exportar.
"Se trata de penetrar y abastecer a cualquier cliente con intereses en el producto cubano", dijo.
En julio el Gobierno de la isla aprobó una medida que permitirá al sector privado exportar e importar bienes y servicios, siempre a través de entidades estatales.
“Uno de los objetivos principales de esta medida y una de las acciones claves que necesitamos en Cuba es que las exportaciones crezcan, que las importaciones sean más racionales y podamos hacer encadenamientos entre todas las formas de gestión para tener mejores resultados económicos”, expresó el Ministro de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, Rodrigo Malmierca Díaz.
Para incentivar la iniciativa el Gobierno ha desplegado un grupo de medidas que pudieran servir de gancho a la incipiente economía paralela al Estado, como bonificaciones tributarias de hasta el 40%, según ha estipulado el Ministerio de Finanzas y Precios de Cuba.
Sin embargo, el Estado es quien se lleva los principales ingresos económicos ya que estas transacciones solo están permitidas en moneda libremente convertible, las cuales se quedarían en cuentas bancarias estatales, todo a través de un total de 37 entidades del gobierno que se encargan de ser intermediarias en las operaciones.
Para defender el "éxito" de esta nueva iniciativa gubernamental, la prensa oficialista se hizo eco de dos casos que pudieran dar la impresión de que todo está marchando bien.
Un campesino cubano exportó a España una tonelada de limones, recibió 846 dólares norteamericanos por su producto, algo que el oficialismo intentó mostrar como un gran logro de la administración del gobernante Miguel Díaz-Canel.
Por su parte, en Italia más de tonelada y media de aguacates de Mayabeque han sido distribuidos en unas 17 ciudades de ese país europeo.
Ambas exportaciones se hicieron a través de la misma entidad estatal: Frutas Selectas.
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