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UJC de Sancti Spíritus acusa de propagación de epidemias a participantes en acto de repudio a Iliana Hernández

Fue por error que la organización comunista condenó el mitin de repudio, al compartir la publicación de una cuenta parodia.

Acto de repudio contra Iliana Hernández. © Captura de video
Acto de repudio contra Iliana Hernández. Foto © Captura de video

Este artículo es de hace 3 años

La cuenta en Twitter de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) de la provincia de Sancti Spíritus publicó un post en el que acusaba de propagación de epidemias a la multitud que protagonizó el acto de repudio a la reportera de CiberCuba, Iliana Hernández, pero no fue un acto colosal de valentía, sino un tremendo error.

Se trató, más bien, de un vergonzoso desliz, pues la “aguerrida” UJC no se percató, al parecer, de que compartía la publicación de otra cuenta dedicada a la parodia llamada Aduana de Cuba. “Esta es la actitud de la contrarrevolución: destruirnos y que se propague la covid”, condenó el organismo.

Captura de tuit de UJC

La cuenta Aduana de Cuba, de quien la UJC tomó la publicación, aclara que se trata de una “página meramente de Parodia”, donde “cualquier pregunta, duda o aclaración es tu problema”. “Vamos a coger para eso a estos corruptos”, dice el perfil, como si se adelantara a los hechos.

Captura de comentarios en Twitter

“Pues que sigan los actos de repudio para que sigan subiendo los contagios”, responde Aduana de Cuba a un tuit del MINSAP, compartiendo imágenes del acto de repudio a Hernández acontecido el martes frente a la casa de la reportera, en la Habana del Este.

El error de la UJC de Sancti Spíritus causó tal confusión entre los usuarios de Twitter, que varios se preguntaron si no se trataba de otra cuenta de parodia. Pero para su desgracia, no lo son. Su perfil dice: “Somos la juventud de Sancti Spíritus, vanguardia en el centro de la isla. #XMiRevolucion #Fidel Haga cada uno su parte de deber, y nada podrá vencernos”. Pero, bien mirado, se vencieron ellos mismos.

Captura de comentarios en Twitter.

Iliana Hernández enfrentó la víspera el acto de repudio frente a su casa, cuando decenas de personas enviadas por el régimen fueron hasta allí a gritar consignas y el nombre del fallecido dictador Fidel Castro. Tranquilamente, la reportera grabó el momento.

Hernández había estado en huelga de hambre junto a los otros manifestantes del Movimiento San Isidro en la casa de Damas 955, una protesta para exigir la liberación del rapero Denis Solís, encarcelado por un presunto delito de “desacato”.

La noche antes del mitin de repudio, la televisión oficialista cubana dedicó varios minutos a amonestar a la reportera y acusarla de “mercenaria” al servicio del gobierno de Estados Unidos. Una suerte similar corrió todos los involucrados en la huelga de San Isidro.

Este miércoles, la reportera cumplió 13 días sitiada por la Seguridad del Estado, que no le permite salir de su casa en el barrio de Cojímar. El órgano represor también instaló, según Hernández, cámaras de vigilancia en la casa de su vecino, quien funge como presidente de los CDR en la zona.

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Maykel González

Periodista de Cibercuba. Graduado de Periodismo por la Universidad de La Habana (2012). Cofundador de la revista independiente El Estornudo.


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