El dramaturgo Yunior García Aguilera publicó este miércoles un breve texto en sus redes sociales donde consideró vergonzosos los actos de repudio, pasadas 24 horas de que la reportera de CiberCuba Iliana Hernández recibiera uno en la puerta de su casa.
García Aguilera fue una de las 32 personas que entraron al Ministerio de Cultura a dialogar con funcionarios cubanos la noche del 27 de noviembre.
"Cuando por fin rindamos culto a la dignidad plena de nuestros hombres y mujeres, recordaremos con vergüenza los actos de repudio", escribió el dramaturgo en Facebook.
En su texto, García Aguilera le intenta dar forma a una Cuba futura. El dramaturgo incluye varios temas en esa isla posible.
De la necesidad de modificar el lenguaje dijo: "Cuando construyamos una patria con todos y para el bien de todos, recordaremos con vergüenza los discursos extremistas y excluyentes. Cuando la soberanía resida en el pueblo, libre y diverso, recordaremos con vergüenza las consignas oportunistas y subordinadas a intereses de grupos".
De la representación ciudadana a través de la política expresó: "Cuando el parlamento nos represente a todos, recordaremos con vergüenza el silencio de los diputados, la parcialización conveniente y la unanimidad autómata".
De la educación del país advirtió: "Cuando seamos un pueblo verdaderamente culto, recordaremos con vergüenza la manipulación mediática, la propaganda burda y la cobertura simplista de los hechos".
García Aguilera sugirió que la revolución debía dejar de ser una "cosa" y convertirse en un "proceso" con el fin de dejar atrás "la rabia intransigente de los dogmáticos, los continuistas y los conservadores".
El dramaturgo criticó el socialismo llamándolo "una caricatura orwelliana" y optando por democracia en lugar de "la corrupción, las soluciones injustas, la brecha enorme entre los trabajadores de a pie y la burocracia sobre ruedas, los privilegios del funcionariado autocrático que (...) advertía Martí".
Yunior García Aguilera calificó de "secuestradores de esas cuatro letras" que le dan nombre a Cuba a aquellos que no permiten que las isla sea de todos los cubanos.
"Cuando entre todos podamos empujar nuestro archipiélago hacia un futuro de justicia, diálogo, paz, prosperidad y concordia, sabremos perdonarnos y seguir adelante. Pero no olvidaremos recordar. Que no se nos olvide la vergüenza", concluyó el dramaturgo.
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