Un grupo de mujeres cubanas detenidas por el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) y recluidas en un centro del estado de Louisiana pidieron a a la nueva administración demócrata que las dejen en libertad para poder presentar sus casos de asilo político.
"No tenemos récord criminal y aún así llevamos casi dos años detenidas por ICE. Llegamos a este país buscando libertad y democracia, y al contrario, hemos recibido opresión", declararon las mujeres a la cadena noticiosa América Tevé.
"Somos mujeres, madres, hijas, hermanas; somos seres humanos que imploramos libertad", alegó en un video la vocera de las detenidas.
Las cubanas también se quejan de que no han recibido la atención médica adecuada en el centro de reclusión y de haber sido víctimas de represalias por estas denuncias.
"Del ICE sólo recibimos mentiras, nunca tienen respuestas para nosotros ni para nuestros abogados", declararon.
"Me preocupa enormemente lo que está pasando con estas jóvenes en la prisión, y tengo esperanzas de que con este gobierno se pueda lograr su libertad", dijo a la cadena el abogado de inmigración Wilfredo Allen.
Se calcula que actualmente hay más de mil cubanos en diversos centros de detención del ICE en Estados Unidos.
La reciente decisión del presidente norteamericano Joe Biden de detener las deportaciones de inmigrantes indocumentados por 100 días, les ha devuelto la esperanza de poder salir de esas prisiones y esperar su proceso en libertad.
Biden también envió al Congreso estadounidense una propuesta de reforma migratoria llamada U.S. Citizenship Act (Ley de Ciudadanía Estadounidense), que ha sido calificada como "la más progresista en la historia". Este plan prevé la legalización en el país de más de 10 millones de indocumentados en un periodo de 8 años.
No obstante, el DHS advirtió que las personas que se encuentren fuera del territorio estadounidense no podrán optar por un estatus legal en virtud del proyecto legislativo de Biden.
Hace más de un año que las detenidas solicitan a las autoridades norteamericanas que las dejen gestionar en libertad sus procesos de asilo.
Desde entonces, se han reportado algunos casos de intento de suicidios y afectaciones mentales graves en migrantes que han permanecidos en dichos centros.
En abril del año pasado un grupo de cubanos fue reprimido con gases lacrimógenos y balas de goma por agentes de ICE en el centro de detención de Catahoula tras exigir una respuesta por el supuesto incremento de enfermos por coronavirus.
Las autoridades federales alegaron que el uso de esos medios había sido necesario para sofocar una revuelta violenta y proteger la seguridad de todas las personas en la instalación.
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