El personal de la salud en Cuba vuelve a lamentar la muerte por coronavirus de uno de sus miembros. Se trata de un médico de 54 años que falleció el martes pasado en Matanzas.
El galeno residía en el municipio de Jovellanos y como antecedentes patológicos personales tenía hipertensión arterial y diabetes mellitus tipo II.
La información la dio en su conferencia de prensa el doctor Francisco Durán García, director nacional de Epidemiología del Ministerio de Salud Pública (MINSAP).
"El paciente que fallece en la provincia de Matanzas es un compañero médico que, igual que todas las personas que lamentablemente tenemos que comentar aquí, pues lamentamos mucho y damos las condolencias a todos los familiares, a las amistades", expresó.
"Vivía en una zona donde ya se habían confirmado numerosos casos", subrayó Durán, quien no aclaró si el médico se contagió mientras laboraba en la atención a pacientes de coronavirus, como ocurre muchas veces con doctores y enfermeros que se infectan, o si fue contacto de algún otro caso confirmado.
El occiso estuvo ingresado 22 días, de los cuales 14 fueron en terapia intensiva.
Según el parte del MINSAP, presentó una disfunción múltiple de órganos, sin respuesta al tratamiento que se le aplicó. Finalmente hizo una parada cardíaca que llevó a que le realizaran maniobras de reanimación cardiopulmonar, que no fueron efectivas.
El doctor Durán lamentó sobre todo la edad tan temprana del fallecido.
"Lo único que pudiéramos decir es que nos demos cuenta de que ha habido cambios, ha habido cambios en el comportamiento de la enfermedad, en la agresividad del virus, para hablar en términos que se puedan entender", precisó.
"Primero, está dando en personas jóvenes y con una evolución que muchas veces no da tiempo a arreglarlo, realmente se hace muy difícil poder salvar a veces vidas con las cuales se hacen todos los esfuerzos", agregó.
El mismo día que este médico moría, un colega y coterráneo suyo denunciaba que él y dos de sus compañeros se habían contagiado de coronavirus debido a una mala gestión de los responsables de su centro laboral.
Aramis Martínez Hernández, médico en el Hospital Docente Julio M. Aristegui Villamil, de Cárdenas, detalló en sus redes sociales que trabajó una semana con un solo traje y un nasobuco como únicos medios de protección para tratar con casos sospechosos y positivos de COVID-19.
"Exigimos y pedimos más, sin respuesta", relató en un extenso escrito publicado en Facebook.
Martínez Hernández cuenta que durante ese tiempo convivió en una sala sin filtros en su interior, sin acceso al cuarto de descanso de los sanitarios y con problemas en la climatización, sin que nadie hiciera nada por resolverlo a pesar de las quejas.
Matanzas es la segunda provincia con peor situación epidemiológica en el país, solo superada por La Habana.
Este miércoles el territorio reportó 95 nuevos casos positivos, el tercero más grave, por detrás de la capital y Holguín, que diagnosticaron 573 y 110 nuevos pacientes, respectivamente.
En toda Cuba se reportaron esta jornada un total de 10 muertes por coronavirus. Además del médico de Matanzas fallecieron siete personas en La Habana, una en Cienfuegos y una en Ciego de Ávila.
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