Los balseros Jairo Aguilera García y Orlando Mazo están en huelga de hambre en Cuba desde el 5 de mayo, tras ser condenados a 10 años de cárcel en la Isla de la Juventud por un delito de tráfico de personas.
Según publica Cubanet, ambos formaban parte de un grupo de 15 personas que intentaron salir ilegalmente del país el 15 de junio de 2020, en una lancha que se dirigía a México.
Sin embargo, el resto de los balseros, incluido un ciudadano mexicano, dueño de la embarcación, quedaron en libertad con una multa de 3.000 pesos cubanos cada uno.
Familiares de Aguilera García denunciaron a Cubanet irregularidades y violaciones del debido proceso durante el juicio. Según su testimonio, solo prestaron declaración los testigos de la Fiscalía porque los de la defensa fueron rechazados.
Esta es la segunda huelga de hambre que emprende Aguilera García desde que fue detenido hace casi un año porque prefiere morir antes de cumplir 10 años de prisión injusta. Él asegura que solo quería emigrar.
Su familia ha recurrido sin éxito a las autoridades del MININT y la Fiscalía. Tanto la madre como la hermana del recluso reclaman justicia.
Miriam García Monrraval, la mamá del plantado, aseguró a Cubanet que ella está en huelga, sin comer, como su hijo, y se queja de la falta de derechos en Cuba.
Desde el inicio de este año fiscal, el 1 de octubre de 2020, la Guardia Costera de Estados Unidos ha interceptado a 228 balseros cubanos. Esta cifra multiplica prácticamente por cinco el número de migrantes procedentes de la Isla rescatados durante el año fiscal 2020 (49).
La cifra de balseros auxiliados en los primeros siete meses de este año fiscal (228) le pisa los talones a los datos de todo el período de 2019 (313).
Todo apunta a que este año cambiará la tendencia descendente de la cifra de balseros interceptados por la Guardia Costera de Estados Unidos en alta mar.
En los últimos cinco años fiscales se venía registrando una tendencia a la disminución del número de intervenciones con balseros. En este período los guardacostas estadounidenses pasaron de detectar 5.396 migrantes en el año fiscal 2016 a 49 cubanos en 2020.
Jairo Aguilera García no es el único preso cubano plantado en huelga de hambre exigiendo justicia en Cuba. A primeros de este mes falleció Maykel Acosta Sánchez en el Combinado del Este, tras 19 días sin comer. Quiso denunciar de esta forma la condena injusta que, según su propio testimonio, recibió desde que era un adolescente.
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