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Cubanos rescatan a niños arrastrados por la corriente en el río Bravo 

Un grupo de cubanos se lanzó al río para cruzarlo y salvó a una decena de menores de edad, presumiblemente hondureños, de ser arrastrados por la corriente, consiguiendo llegar sanos y salvos a la otra orilla.

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Este artículo es de hace 1 año

Un grupo de inmigrantes cubanos rescató a varios niños, presuntamente hondureños, que fueron arrastrados por la corriente del río Bravo cuando intentaban cruzar este viernes sus aguas para alcanzar territorio estadounidense.

“Esperemos que los cubanos ayuden a los niños”, dijo un reportero del sitio ‘Lo que otros callan Piedras Negras’, cuyo canal de Facebook transmite en directo el paso de grupos de inmigrantes por el río Bravo, a la altura de la localidad fronteriza de Piedras Negras, en México.

Cercano al Puente internacional Nº2 que conecta ambos países, un grupo de una decena de cubanos se lanzó al río para cruzarlo. En su avance, llegaron hasta un islote en medio del río, donde se había refugiado otro grupo de migrantes, en su mayoría provenientes de Honduras y entre quienes se podía distinguir la presencia de una decena de menores de edad.

En total, en el islote al que llegaron los cubanos se llegaron a juntar una treintena de migrantes que durante un buen rato estudiaron cómo continuar su camino por el lecho del río hasta llegar a la otra orilla. Al otro lado se distinguía la presencia de un agente de la Patrulla de Fronteras de EE.UU.

Si bien el curso del río entre la orilla mexicana y el islote aparentaba transcurrir sin mucha fuerza, la corriente entre este y la orilla estadounidense parecía transcurrir con mayor fuerza, haciendo dudar a los migrantes en su avance, por temor a verse arrastrados río abajo.

Los cubanos, originarios de La Habana, según dijeron al reportero mexicano, fueron los primeros en intentar la segunda parte de la travesía. La grabación, realizada con un teléfono móvil, impedía captar en detalle lo que sucedía en el islote.

Sin embargo, en la narración del suceso hecha por el reportero mexicano se afirma que los cubanos ayudaron a cruzar a los niños que esperaban en el islote, salvándolos de ser llevados por una corriente que en cuestión de segundos los arrastró una decena de metros sin que supieran cómo reaccionar.

A finales de marzo, un migrante cubano salvó a una niña y a su madre -también cubanas- de morir ahogadas al cruzar el Río Bravo, algo que fue confirmado en emotivas imágenes por la propia mujer, momentos después del incidente.

“Acabamos de cruzar ahora, no se murió nadie. Todos vivos. Mira cómo está ese río crecido. Todos vivos. Gracias a Dios", dijo Jorge Carlos Santana Dumont en un vídeo filmado en los instantes posteriores al peligroso cruce, en el que precisó que había ayudado a una mujer y a su pequeña hija en el difícil trance.

“Nos salvó la vida, nos salvó la vida”, confirmó la mujer que estaba junto a la niña que lloraba, debido al impacto emocional de lo sucedido. “Me sentí que hice algo bueno en la vida, algo grande, porque en mi simple mano derecha se encontraba la vida de esa mujer y de esa niña”, dijo Santana Dumont en un vídeo posterior difundido a través de Facebook, en el que agradeció a quienes lo felicitaron por haber arriesgado su propia vida para salvar a la madre y a su hija.

A comienzos de abril, un grupo de unos 14 migrantes cubanos, entre los que había una familia con un niño de tres años, tuvo que ser rescatado por las autoridades mexicanas y estadounidenses cuando sus integrantes estaban a punto de ser arrastrados por la corriente del río Bravo, que bajaba entonces con mayor ímpetu que este viernes.

En las últimas semanas se ha hecho habitual la difusión en redes sociales de imágenes similares. En días recientes se vio a otro grupo de cubanos cruzar atados por una cuerda para evitar separarse por la fuerza de la corriente del río.

Días después, las imágenes de dos grupos de cubanos entre los que se encontraban varios menores de edad, fueron difundidas en sitios de la localidad de Piedras Negras cruzando las aguas del río Bravo, sin que hubiera que lamentar mayores incidentes.

La entrada irregular de cubanos por la frontera sur de Estados Unidos alcanzó en marzo una cifra superior a las 32 mil personas, lo que pone a la administración Biden ante el dilema de lidiar con una nueva crisis migratoria de cubanos que escapan de la crítica situación que atraviesa la Isla con escasez de medicinas y alimentos, y una cúpula enrocada en el poder dispuesto a mantenerse en esa posición aún a costa de mayores sufrimientos para el pueblo cubano.

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