Cientos de cubanos desfilaron a ritmo de conga por calles de Centro Habana y La Habana Vieja este sábado en una actividad organizada por el Gobierno para dar inicio al verano y promovida por la cadena de Tiendas Caribe, cuyas ventas son en Moneda Libremente Convertible (MLC), un lujo que no está al alcance de toda la población.
“Y sin dudas que un verano sin zanqueros poniendo ritmo en la calle más famosa de Cuba, Obispo ¡No es un verano! ¡Vamos con TODO, vamos por más! Los zanqueros al compás de conga colocaron sabor y alegría que terminó en Harris Brothers, dando inicio a este VERANO”, presumió una de las publicaciones oficialistas que dio cuenta de la celebración.
Imágenes de la actividad festiva, que circuló entre otras calles por Galiano frente al Centro Comercial La Época -donde hubo concierto de Anacaona- y tuvo como uno de sus centros neurálgicos la tienda Harris Brothers, generó inmediata indignación en decenas de internautas.
No pocos reprocharon que en medio de la tremenda escasez que reina en el país, los cubanos sean capaces de salir a bailar en vez de protestar por la miseria que padecen.
“Sin palabras, siempre lo he dicho, tienen lo que merecen”; “¡Qué pueblo tan pero tan asqueroso, se merecen lo que tienen, que se jodan!”; “Que sigan pasando hambre y miseria,se lo merecen por carneros”; “El cubano tiene lo que se merece”; “Felices los carneros dentro de la isla cárcel”, comentaron algunos usuarios indignados -residentes fuera del país- en los diferentes foros donde se han difundido imágenes de la celebración.
“No se cuál es el motivo de la gozadera... Yo no veo ningún motivo para festejar. Es verdad que el cubano con una lata y un palo se le olvida todo...”, lamentó otro internauta.
“El problema de esto es que pagamos todos por culpa de todos los estúpidos que con un poco de música y bebida se les olvida la miseria que estamos viviendo”, opinó un comentarista residente en el país.
Imágenes publicadas por establecimientos de Tiendas Caribe en Sancti Spíritus revelan que la celebración, que tuvo lugar pocas horas antes de que se cumple el primer aniversario de las históricas protestas antigubernamentales del 11J, tuvieron lugar no solo en La Habana.
La actividad festiva llega en un momento de grandes apagones y fuerte escasez de alimentos, agravada desde la aparición del coronavirus y que no ha dado muestras de mejora a pesar de la mejoría de la propia pandemia.
En los mercados estatales no hay nada, la canasta básica sigue siendo insuficiente, y los precios de los alimentos en las Tiendas en Moneda Libremente Convertible (MLC) están fuera del alcance de la mayoría de los cubanos.
Mientras el gobierno apuesta a su plan de Soberanía Alimentaria, los ciudadanos intentan sortear la escasez para poner un plato de comida en la mesa todos los días, ello en medio de la imparable inflación y de grandes colas para adquirir lo poco que hay.
No obstante, el gobierno cubano afronta el primer aniversario del 11J en La Habana no solo a ritmo de conga, sino también vendiendo pollos congelados en pesos cubanos y reduciendo los apagones al mínimo, ello mientras continúan las acciones represivas y de intimidación contra periodistas independientes y activistas por los derechos humanos en Cuba.
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