APP GRATIS

Estado y presidente fallidos aplastan a Cuba

¿Para qué ha servido el predominio de los guardias en la economía? Para destimbalar aun más a Cuba.

El presidente Miguel Díaz-Canel en Batabanó © Presidencia de Cuba
El presidente Miguel Díaz-Canel en Batabanó Foto © Presidencia de Cuba

Este artículo es de hace 1 año

Que a estas alturas del tardocastrismo, el presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez exhorte a los cubanos a sacar lecciones del paso del huracán Ian es una bofetada para millones de sus víctimas, aplastadas por un estado y un mandatario fallidos.

¿Qué lecciones sacó Díaz-Canel del paso del huracán Ágatha por la capital cubana? Cero. ¿Qué lecciones sacó Díaz-Canel del balcón caído que mató a tres niñas en La Habana Vieja? Cero.¿Qué lecciones sacó Díaz-Canel del tornado que arrasó parte de La Habana? Cero.

La resistencia ¿creativa? del pupilo favorito de Raúl Castro Ruz ha empeorado la nefasta herencia recibida y Cuba es ya un estado fallido, incapaz de garantizar servicios básicos a la población como electricidad y agua potable.

La mona -aunque se vista de verde oliva- primate se queda y los cubanos están hartos de ver aparecer al primer secretario del gobernante partido comunista, acompañado de la comisión de embullo correspondiente, pidiendo más resistencia y sacrificios en nombre de un futuro que no tienen porque el castrismo se lo robó a la fuerza.

Cuba no está en crisis terminal desde 2019, sino desde que Fidel y Raúl Castro dieron sonoros portazos a Mijaíl Gorbachov y Barack Obama; respectivamente, y asustados por la posibilidad de perder el poder omnímodo sobre la isla; de aquellos fangos vinieron lodos continuistas.

El voluntarismo siempre es erróneo y ninguna idea o proyecto político es tan importante y necesario como para sacrificar a un pueblo entero, incluidos aquellos cubanos que aun defienden la revolución que se fue a bolina, como esas empobrecidas mujeres de Pinar del Río, sollozando ante el capataz de la finquita ruinosa.

Si alguna duda quedaba de la insensibilidad e insensatez de la casta verde oliva y enguayaberada, la muerte de Andy Reyes Cruz, tras 53 días de huelga de hambre en Sancti Spíritus, la incapacidad gubernamental para rearrancar el Sistema Electroenergético Nacional (SEN) y la represión violenta post 11J, las despejan.

¿Para qué ha servido tener a un ingeniero eléctrico y doctor en Ciencias Técnicas en la presidencia de la república? Para oscurecer más a Cuba.

¿Para qué ha servido el predominio de los guardias en la economía? Para destimbalar aun más a Cuba.

¿Para qué ha servido perpetrar un Código de las Familias, dizque progresista y avanzado? Para aplastar aun más a la familia cubana, desestructurada desde hace años y flagelada por la represión tiránica, la pobreza inclemente y la emigración incesante.

Raúl Castro, Díaz-Canel y Manuel Marrero Cruz no dan pie con bola porque persisten en resolver déficits crónicos con caducas recetas; en otro alarde de esquizofrenia política, que se los puede llevar por delante y ponerlos frente a un tribunal por apalear, hambrear y esquilmar a un pueblo noble y con inaudita capacidad de sacrificio.

El Titanic se hundió porque su capitán desoyó los avisos de iceberg en ruta y parece que tal temeridad fascina a los zares de Siboney, que empiezan a parecerse más a Benito Cereno de Melville; arrojado al mar por la marinería sublevada, que a Edward John Smith.

¿Qué opinas?

VER COMENTARIOS (1)

Archivado en:

Artículo de opinión: Las declaraciones y opiniones expresadas en este artículo son de exclusiva responsabilidad de su autor y no representan necesariamente el punto de vista de CiberCuba.

Carlos Cabrera Pérez

Periodista de CiberCuba. Ha trabajado en Granma Internacional, Prensa Latina, Corresponsalías agencias IPS y EFE en La Habana. Director Tierras del Duero y Sierra Madrileña en España.


¿Tienes algo que reportar?
Escribe a CiberCuba:

editores@cibercuba.com

 +1 786 3965 689


Siguiente artículo:

No hay más noticias que mostrar, visitar Portada