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Cubanos hacen tres días de cola para comprar pastas en La Habana

Pese a que el producto llegó a la tienda el lunes, el miércoles no lo habían vendido porque no había factura, código ni precio.

Cola para comprar pastas en La Habana © Ileana Ortega / Facebook
Cola para comprar pastas en La Habana Foto © Ileana Ortega / Facebook

Este artículo es de hace 1 año

Una cubana residente en La Habana denunció que en su barrio, en el municipio Boyeros, la población tuvo que hacer tres tres días de cola para comprar pastas.

Ileana Ortega, periodista de profesión, relató el miércoles que llevaba tres días de "cola y espera innecesaria" en el Rápido de Reloj Club, para adquirir pastas, a pesar de que el producto había llegado 72 horas atrás.

"Lo recepcionaron el lunes 9 enero, y según autoridades del lugar, no despachan por no haber factura o código o precio o...", detalló en su muro de Facebook.

Captura de Facebook / Ileana Ortega

Ortega señaló que aunque hubo buena disposición de las autoridades para organizar e informar, eso no basta cuando lo inminente es que el producto llegue a la población en el menor tiempo posible.

"La demora de decisiones de la cadena CIMEX y la información oportuna sobre la distribución, qué, cuándo y cómo será, empaña el buen funcionamiento. Es necesario que las distribuidoras tomen cartas en el asunto para que situaciones como esta no se repitan", concluyó.

En medio de la crisis generalizada en el país, el régimen implantó un nuevo sistema de venta regulada de algunos productos en moneda nacional en las tiendas CIMEX y Caribe, para evitar las colas y la sobrecompra por parte de los revendedores.

A finales de diciembre, un reportaje de la televisión oficialista en La Habana mostró las insatisfacciones de la población con el complejo entramado organizativo.

Los usuarios criticaron la inestabilidad en los surtidos y la diferencia entre las tiendas, unas abastecidas y otras casi vacías, y el abastecimiento incompleto de los cinco productos a los que tienen derecho una vez al mes, que los obliga a acudir varias veces a la tienda.

Unos días antes, en una tienda en el municipio Cerro, una inmensa cola para comprar pollo terminó con la presencia de la Policía y la gente gritando a coro: "¡Queremos el pollo!".

El escándalo fue tal que el semanario oficialista Tribuna se refirió a él en sus páginas.

"Mala información, desorden, disgusto, etc, ocurrió en el lugar. Mala distribución y organización de la cola, cambios de numeración sin que los anteriores hubieran adquirido sus productos, etc. llevaron a este lamentable hecho", señaló el reportaje.

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