El mandatario Miguel Díaz-Canel ordenó las "prioridades" del país en un "acto cultural por el Team Asere", calificativo que se ha hecho viral entre los partidarios del régimen para identificar a la selección cubana que jugará en semifinales este domingo en el V Clásico Mundial de Béisbol.
"El próximo domingo todos, unidos, vamos a apoyar la victoria que ellos van a salir a buscar", expresó el gobernante desde la escalinata de la Universidad de La Habana.
Pero a seguidas, sin transición, pasó a la política y la propaganda.
"Y una semana después, todos vamos a dar un voto por la patria, por la revolución, por el socialismo, por Fidel y por Raúl. Si ustedes están de acuerdo que siga esta fiesta, este acto, por el Team Asere", afirmó enardecido, aprovechando el entusiasmo que genera el deporte nacional en los cubanos.
Díaz-Canel usó en el acto la gorra del equipo y un pullover del llamado "team asere".
Presionado por la amenaza de que varios integrantes del equipo se queden en Miami, sede de la etapa final del Clásico Mundial, Díaz-Canel agradeció a los deportistas y dijo que "ellos ya ganaron porque entraron en los corazones del pueblo, por eso los apoyaremos en su lucha por la victoria que buscarán en el próximo juego".
Desde Miami decenas de cubanos criticaron al gobernante por politizar la presencia de Cuba en el Clásico y utilizarlo para promover el voto en las elecciones del próximo 26 de marzo.
"No es el exilio quien politiza la pelota, no somos nosotros los que llevamos años fuera de nuestra tierra los que mezclamos todo con política. Son ellos, la dictadura cubana", denunció el grupo humorístico los Pichy Boys en Instagram.
Parte del exilio cubano ya anunció que habrá protestas en el juego, tal como sucedió en 2021 en el Preolímpico de las Américas, que se jugó en West Palm Beach.
El régimen cubano teme a la abstención en las próximas elecciones, al punto que ha enviado a niños a tocar puertas para convocar a la jornada de votación del 26 de marzo. Asimismo, autoridades del gobierno en el municipio Nueva Paz, Mayabeque, obligaron a trabajadores estatales a firmar un compromiso de participación en las votaciones.
El próximo 26 de marzo se votarán a los 470 candidatos a diputados de la Asamblea Nacional del Poder Popular (Parlamento), quienes necesitan más de la mitad de las boletas válidas emitidas en el municipio o distrito electoral, según la ley vigente.
Las elecciones cubanas no admiten la presencia de observadores internacionales independientes; mientras que la sociedad civil organizada tampoco puede fungir como observadora, pues sus activistas suelen ser reprimidos o amenazados por la Seguridad del Estado.
Activistas llamaron a la abstención o la no participación en la elecciones del llamado 26M, para no legitimar un proceso caracterizado por la falta de transparencia y el control totalitario de los comunistas.
En los dos procesos electores previos (Código de las Familias y elecciones a delegados municipales) las tasas de abstención fueron las más altas de los últimos 60 años en Cuba.
En esos procesos el gobierno llegó a reconocer que se trataba de un castigo de la población por la crisis generalizada que vive el país.
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